En un alocución televisada de 13 minutos de duración, admitió que el país afronta “un momento histórico” y pidió a las grandes empresas que participen en el esfuerzo necesario para cambiar la situación.

Macron subira el salario minimo y bajara impuestos para calmar las protestas

En un alocución televisada de 13 minutos de duración, admitió que el país afronta “un momento histórico” y pidió a las grandes empresas que participen en el esfuerzo necesario para cambiar la situación.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció este lunes 10 de diciembre de 2018 que subirá en cien euros el salario mínimo y que bajará impuestos a los pensionistas y a los trabajadores, en un discurso en el que trató de responder a las demandas del movimiento de los “chalecos amarillos”.

Macron reconoció que sus palabras “han herido a algunos” en el pasado y consideró justificado el descontento que ha provocado las protestas, por lo que anunció que decreta un “estado de emergencia económico y social” para hacerle frente.

En un alocución televisada de 13 minutos de duración, admitió que el país afronta “un momento histórico” y pidió a las grandes empresas que participen en el esfuerzo necesario para cambiar la situación.

Macron indicó que ese aumento del salario mínimo (que en la actualidad es de 1.498 euros brutos) entrará en vigor en 2019 “sin que le cueste nada al empleador” y añadió que las horas extraordinarias estarán exentas de impuestos y cargas también a partir del año que viene.

El mandatario solicitó además a los empresarios “que puedan” que entreguen a sus empleados una prima de fin de año que también quedará exonerada.

Asimismo, recalcó que los jubilados que ganen menos de 2.000 euros mensuales verán anulada la subida de la Contribución Social Generalizada (CSG), un impuesto proporcional sobre los ingresos profesionales o de capital que financia la Seguridad Social.

Por el contrario, no aceptó reinstaurar el impuesto sobre la fortuna (ISF), que lo pagaban aquellos con un patrimonio neto imponible superior a los 1,3 millones de euros y que fue sustituido por un impuesto sobre la fortuna inmobiliaria (IFI).

“Queremos una Francia donde una persona pueda vivir dignamente de su trabajo. Pido al Gobierno y al Parlamento que hagan lo necesario”, concluyó sobre el conjunto de medidas previstas, que fueron acompañadas de una condena a los actos de violencia registrados en las protestas.

Impacto económico

El impacto económico de esta crisis, que entra en su cuarta semana, inquieta también; varios comercios en París y en provincias decidieron no abrir en los últimos sábados de manifestaciones y disturbios, renunciando a importantes ingresos a dos semanas de las fiestas de fin de año.

Según indicó este lunes el ministro de Finanzas, Bruno Le Maire, los disturbios que han acompañado estas manifestaciones le costarán a Francia 0,1% de su PIB.

“Veo que esto tiene impacto en el extranjero, y no es bueno para la imagen de nuestro país”, dijo.

Poco tiempo después de las declaraciones del ministro, el Banco de Francia dividió por dos sus previsiones de crecimiento del PIB francés para el cuarto trimestre: 0,2% en lugar de 0,4%.

El domingo, el ministro de Exteriores, Jean-Yves Le Drian, uno de los últimos pesos pesados del gobierno que viene de la izquierda, opinó que Macron “debe fijar un claro rumbo” hacia “un nuevo contrato social”.

Por su lado, Bruno Le Maire se declaró “totalmente dispuesto a acelerar una baja de impuestos”.

Pero el jefe de los diputados del partido presidencial (La Republica en marcha, LREM), Gilles Le Gendre, advirtió contra la tentación de cometer “errores” en nombre de la justicia social.