Guillermo Lasso
La reforma propuesta por el presidente Lasso está vigente desde hace más de un año gracias a que el correísmo no votó por el archivo.René Fraga

Guillermo Lasso veta totalmente la derogatoria de la reforma tributaria y acusa a la Asamblea de “irresponsable”

El mandatario advierte que se perderían recursos para lo social. La Corte Constitucional tendrá la última palabra

El presidente Guillermo Lasso objetó totalmente el proyecto de Ley para derogar la reforma tributaria, que fue aprobado por la Asamblea Nacional el 30 de noviembre pasado de 2022, acción que es calificada como “irresponsable e inconstitucional” ´por el mandatario.

La norma se encuentra vigente desde noviembre de 2022. Entró al Registro Oficial por el ministerio de la ley, gracias a que el bloque de Unión por la Esperanza (Unes) se abstuvo de votar por el archivo planteado por Pachakutik.

En la notificación enviada por el presidente Lasso a Virgilio Saquicela, titular de la Asamblea, se advierte que la objeción total es por inconstitucionalidad y subsidiariamente objeta totalmente por inconveniencia.

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La primera se justifica, según el Ejecutivo, porque solo al presidente de la República le corresponde presentar iniciativas de ley encaminadas a modificar, crear o suprimir impuestos, como está establecido en la Constitución.

“Y subsidiariamente, en caso de que la Corte Constitucional determine la constitucionalidad del proyecto”, señala el documento enviado a la Asamblea.

Agrega: “por estas razones, ante el obrar irresponsable del legislativo y en atención a la responsabilidad constitucional que la Función Ejecutiva ejerce sobre la Administración Pública, corresponde al colegislador actuar con responsabilidad y objetar totalmente este proyecto de ley”.

El documento pasará a la Corte Constitucional y si ratifica la objeción total a la derogatoria a la Ley Orgánica para el Desarrollo Económico y la Sostenibilidad Fiscal tras la pandemia de la Covid-19 no podrá ser tratada en un año, lo que significa que seguirá vigente ese tiempo.

Según el mandatario, derogar una ley que permite una recaudación estimada de $ 946 millones anuales atenta contra la estabilidad económica y sostenibilidad fiscal, ya que esos recursos se estarían destinando a salud, educación y otras prestaciones sociales.

Recuerda además que asumió la administración con un déficit de 7.000 millones de dólares y que medidas como el incremento impositivo a quienes más tienen han permitido bajarlo hasta los 2.000 millones de dólares.

“Además, reperfilando y reprogramando la deuda externa con tasas más bajas y plazos más amigables, pero aún se requiere suma prudencia y responsabilidad, pues dicho déficit aún existe”, señala Lasso en los argumentos.