Elecciones. Alejandro Domínguez ocupaba el cargo interino en el organismo por Napout. Ayer en los sufragios fue respaldado.

CREO, el partido en jaque

Ataque o defensa. A la cúpula política de CREO, liderada por Guillermo Lasso, le queda claro que el movimiento de La Unidad lo ha dejado momentáneamente en jaque: entre la presión política y mediática por tomar una postura común, y la presión interna por aferrarse a las cifras y encuestas que, de momento, sitúan a su líder como el más opcionado de los presidenciables.

A diferencia del resto de la oposición, claramente fijada en el entorno legislativo, a CREO le obsesiona Carondelet. Y el partido presume de cifras que distancian a Lasso de cualquier otra opción.

El jefe del bloque legislativo, Patricio Donoso, ha reivindicado esa postura al argumentar que Ecuador es un sistema presidencialista. “Para gobernar se necesita ganar la presidencia”, apunta Donoso. “Es importante la Asamblea, sí. Pero la prioridad es la presidencia”, dice y cita la capacidad de fijar la política exterior, promover la legislatura de carácter económico y, sobre todo, vetar desde Carondelet las iniciativas legislativas. “Es un hiperpresidencialismo. Y toda decisión pasa por sus manos”.

Con una intención del voto cercana al 26 %, según la encuesta menos favorable, a CREO le cuesta imaginar un escenario donde se siente a la mesa, por ejemplo, con Ramiro González, líder de Avanza, quien recientemente se sumó a La Unidad concretada en Cuenca. No es cuestión de números, dice, sino de principios.

Aparicio Caicedo, uno de los asesores más visibles del grupo, descarta que el partido de Lasso pueda participar en un acuerdo bajo “la conveniencia del momento”, aun bajo la “posibilidad de una fragmentación que favorezca al oficialismo”.

Si bien la entrada de González, quien se sumó de última hora a la cita organizada por el alcalde Jaime Nebot, se ha convertido en la principal excusa de CREO para no sentarse a la mesa, tampoco lo habían hecho antes, aduciendo “que no ha habido una invitación formal”. Y respecto a las aseveraciones de Nebot, quien en la entrevista publicada ayer por este Diario aseguró haber invitado personalmente a Lasso (ver subnota), Caicedo se limita a responder: “No. Hasta donde yo sé, eso no es así”.

El caso es que, aunque la convocatoria de La Unidad sigue abierta, resulta poco probable que CREO se sume a este esfuerzo, según fuentes del partido. Aunque ratifican la participación para la convocatoria de Pachakutik, que tendrá lugar el miércoles, en Quito.

El movimiento de Lasso no tiene claro que unirse a otros grupos le conceda más beneficios que dolores de cabeza. Y en caso de necesitar apoyos adicionales en la ruta al poder, están seguros de que este no es el momento. “Para eso se inventó la segunda vuelta”, recuerda Donoso, quien no descarta que, tras la primera votación, su candidato sume el apoyo general de la oposición. “Veo ese escenario francamente posible”.

Hay quienes son más optimistas. Muchos consideran al interior del grupo que una fragmentación del pastel electoral podría ampliar la distancia entre Lasso y otras opciones.

César Monge, presidente de la agrupación, asegura que tienen la mirada más dentro que fuera. Y cita “la estructura territorial más potente del panorama político” como el músculo electoral necesario para aferrarse a sus propias capacidades. En cuanto al debate de adherirse o no a otros grupos, Monge zanja: “No ha habido mucho dilema en eso”. Se saben solos. Se piensan capaces. No hay mate.

Diálogos sin tinte electoral

Ramssés Torres (i), alcalde de Guaranda y anfitrión del primer esbozo de La Unidad, cuando hace año y medio 22 autoridades zonales de oposición firmaron una declaración en esa ciudad, conversa con Lasso, cuyo movimiento ha pactado acuerdos para demandar el proceso de enmiendas y hacer control electoral. Pero, de momento, no pacta sobre los votos.

Respuesta

Lasso: No he sido invitado por Nebot

“No he recibido de él ninguna invitación formal o informal, pública o privada, para conversar sobre una eventual incorporación de CREO a la alianza del Partido Social Cristiano con SUMA y otros movimientos”. Es la repuesta del líder de CREO, Guillermo Lasso, a la afirmación del alcalde Jaime Nebot (que publicó Diario EXPRESO en su edición de ayer) acerca de una invitación formal de Nebot a Lasso para integrar La Unidad.

El excandidato presidencial dijo que respeta a Nebot y que nunca “dejaría de atender un llamado de él para conversar”. No obstante, destacó que quienes ahora lo acompañan han manifestado: “Aquí no puede estar Lasso porque si está, no puedo traer a Pachakutik”. Frente a esto, el político recordó que recibió una invitación de Pachakutik para conversar y defender el derecho a una consulta popular.

Reafirmó su compromiso de una unidad con las familias, “prioridad que no descarta el diálogo con los políticos, pero no con todos”. “No comprendo cómo se podrá rescatar el Ecuador con quienes, hasta hace muy poquito tiempo, fueron parte del descalabro del país”. AAE