México. La comunidad de españoles radicados en Guadalajara se manifestó en contra de la independencia.

Espana “hara todo” para impedir la independencia

El jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró ayer que “hará todo lo que haga falta” para impedir la independencia de Cataluña, en la víspera de que el presidente de esta región, Carles Puigdemont, acuda al Parlamento local con la hipótesis de d

El jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró ayer que “hará todo lo que haga falta” para impedir la independencia de Cataluña, en la víspera de que el presidente de esta región, Carles Puigdemont, acuda al Parlamento local con la hipótesis de declarar unilateralmente la secesión.

Rajoy congregó ayer a la dirección de su partido (PP, centroderecha) para una reunión centrada en analizar la situación en Cataluña, a la espera de saber si Puigdemont anuncia hoy la independencia durante una comparecencia prevista para las 16:00 GMT.

“Vamos a impedir la independencia de Cataluña. Tomaremos las medidas para impedirlo que sean necesarias. La separación de Cataluña no se va a producir. El Gobierno hará todo lo que haga falta para que así sea”, fueron las palabras de Rajoy, según informó ayer con posterioridad a la prensa el portavoz del PP, Pablo Casado.

En tanto, el Congreso español trabaja con la previsión de que Rajoy comparezca ante los diputados mañana para dar cuenta de su posición sobre la situación política en la región española de Cataluña.

El pasado 1 de octubre tuvo lugar en Cataluña un referéndum soberanista ilegal que, según el Ejecutivo regional, registró 2,04 millones de votos favorables a la secesión, un hecho que, según Puigdemont, legitima esa aspiración.

En principio, la comparecencia del líder catalán en el Parlamento regional es para informar acerca de la situación política en Cataluña tras la consulta irregular de la semana pasada, pero nadie duda de que hará algún tipo de anuncio.

Ayer todas las miradas convergían en Puigdemont, que en los últimos días ha asegurado que dará curso al mandato independentista, pero ha dejado alguna puerta abierta a no hacerlo de manera radical.

El dirigente del PP Pablo Casado generó una fuerte polémica tras advertir a Puigdemont que puede acabar como el líder nacionalista Lluis Company, que en 1934 proclamó la República Catalana, aunque unas horas más tarde fue detenido y acabó en prisión.

El Gobierno español tampoco aceptará la hipótesis de que Puigdemont declare la independencia, pero la difiera durante unos meses para dar oportunidad a un eventual diálogo, según Casado.

Frente a estas eventualidades el Ejecutivo de Rajoy actuaría “con mano firme y sin complejos”, según el portavoz del PP, quien no descartó ninguna medida que permite la Constitución o el Código Penal.

Eso incluye el artículo 155 de la Carta Magna, que prevé que el Estado central asuma directamente las competencias de una región cuyos dirigentes incumplan la ley y que nunca se ha aplicado en casi cuarenta años de vigencia de ese texto.

Ayer fueron muchas las voces que reclamaron a Puigdemont un gesto de sensatez para que hoy renuncie a la eventual declaración unilateral de independencia.

También lo pidió una figura de referencia en Cataluña, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, quien además reclamó al líder catalán y a Rajoy que “no tomen ninguna decisión que pueda dinamitar la posibilidad de un espacio de diálogo”.

En el terreno empresarial continúan los movimientos y ayer el Grupo Editorial Planeta, el más importante de España, anunció que trasladará su sede social de Barcelona a Madrid “si se produce una declaración unilateral de independencia en Cataluña”.

Después de que en días pasados cambiaran su sede grandes compañías, como Caixabank, Banco Sabadell, Gas Natural y Aguas de Barcelona, ayer lo hicieron (con destino a Madrid) la inmobiliaria Colonial y la concesionaria de autopistas Abertis, con presencia en Puerto Rico, Argentina, Brasil, Chile y Colombia.