Lo que puede ser una señal de reactivación económica, también se constituye en un problema. La venta de autos a escala nacional ya superó los niveles prepandemia y en Quito no es la excepción.

Solo en la provincia de Pichincha, en los primeros cuatro meses de 2022 se vendieron 16.585 autos, según datos de la Asociación de Empresas Automotrices del Ecuador (Aeade).

Las ventas en Pichincha representan el 37 % del total nacional y superan a otras provincias grandes del país, como Guayas o Azuay. Es decir, Pichincha compra casi cuatro de cada 10 autos que se venden en todo el país.

Si se compara con 2019, en Pichincha se vendieron 756 unidades más, con lo cual ya se superan los niveles previos a la pandemia de COVID-19.

“Hay una mayor demanda que oferta actualmente en el sector automotriz”, aseguró Genaro Baldeón, presidente ejecutivo de la Aeade.

Pichincha históricamente ha sido la provincia con mayor demanda de autos, señaló Baldeón. Entre los factores, mencionó la mayor densidad poblacional de Pichincha y también la mayor formalidad en los empleos de los capitalinos, lo cual les permite acceder con mayor facilidad a financiamiento, explicó el titular de la Aeade.

El creciente parque automotor es uno de los problemas que debe afrontar la capital y que agravan el tráfico. Tras el regreso al trabajo presencial, el tráfico en Quito se ha vuelto un problema mayor.

Según Global Traffic Scorecard de Inrix (empresa especializada en análisis de datos de movilidad en el mundo), en 2021 un conductor en Guayaquil perdía 47 horas al año por el tráfico. Mientras que en Quito, pasaron 63 horas por los congestionamientos vehiculares. Es decir, en la capital se pierden al año 16 horas más por este problema.

En ese contexto, el Municipio ha buscado resolver los problemas de tránsito con medidas que han tenido hasta ahora poca efectividad.

Por ejemplo, el Municipio volvió al pico y placa y ha adoptado contraflujos vehiculares (aumentar un carril más en el sentido más transitado), aunque sin resultados importantes.

De hecho, desde este lunes 30 de mayo se implementará un tercer contraflujo en la ciudad, en la avenida Velasco Ibarra (oriente de Quito). El alcalde de Quito, Santiago Guarderas, ha señalado que es probable que el pico y placa pase de dos a cuatro dígitos para reducir el tráfico.