La idea surgió como una broma entre amigos: si este año no era posible quemar el tradicional año viejo, habría que hacer uno “bioseguro” para prender en casa, al menos de manera simbólica.

“Mientras más lo hablábamos nos parecía más y más lógico, porque seguramente había mucha gente en la misma situación que nosotros”, narró risueño José Luis Rodríguez.

Así nació ‘Tiny Gotes’, un emprendimiento artesanal que lanzó al mercado una colección de años viejos miniatura que se pueden quemar en casa e incluso coleccionar.

“Antes de saber que estaría prohibida la quema de ‘los viejos’ pensamos en la situación económica de muchas familias que no podrían comprar uno porque la situación está difícil y son algo caros”.

Empezaron con un tiraje de 2.000 monigotes diminutos, en nueve presentaciones, y hoy ya solo queda el 20 % de la producción original. “La respuesta ha sido sorprendente. Nos busca gente de todas las edades, sobre todo familias con niños”, estableció Rodríguez.

Para los más chicos hay personajes animados como Goku, la Pantera Negra, Homero Simpson y Sonic. También hay personajes como Baltazar Uscha, el último hielero del Cotopaxi, y políticos, entre los que están Álvaro Noboa, Rafael Correa y Abdalá Bucaram.

“El décimo es neutro, para quienes hasta prefieren ponerle una careta con la cara de algún amigo o familiar”, indicó el empresario.

Estos cuestan $ 7,99 cada uno e incluso se ofrecen promociones que incluyen la entrega a domicilio con un kit de fósforos, líquido inflamable y un llavero de recuerdo.

Están a la venta en las cadenas Super Paco, Tía Tula (en el valle de los Chillos y Cumbayá), el local Pixel (en el centro comercial El Caracol) y a través de la página de Instagram de la marca artesanal.

Rodríguez agrega que, si bien esperan que en 2021 la festividad regrese a la normalidad, sí consideran una nueva producción de ‘tiny gotes’.