Columnas

El apóstol Marco Benetazzo (III)

En su hogar procrearon tres hijos, Marco, Luis y Enrique, habiendo sido Luis, quien me facilitó los datos biográficos para poder rendir homenaje al padre Marco

Radicado en Babahoyo y Barreiro organizó grupos de oración, catequistas, organizaciones campesinas, comités barriales, la asociación de pescadores de Barreiro. Organizó y formó parte de sus filas en el cuerpo de bomberos de Babahoyo, los niños Boy Scouts e incluso en 1934 formó el Club Sport Venecia, puesto que era fanático del fútbol y la población de Barreiro, que se inundaba en los meses de invierno lluvioso, conociéndosela como la Venecia de Babahoyo.

Durante su etapa de sacerdote diocesano en Los Ríos (veinte años), le tocó atender y organizar las parroquias de Babahoyo, Jujan, Febres Cordero, Montalvo, Balzapamba, Pimocha, Baba, Caracol, La Unión, Pueblo Viejo, y decenas de pequeños recintos donde oficiaba actos litúrgicos para una población de más de cuarenta mil feligreses. Fue nombrado vicario ecónomo de Los Ríos y en 1934 inauguró solemnemente la iglesia de Babahoyo, construida de cemento armado, en honor a la Virgen de la Merced, su patrona. Desde esta fecha, padre Marco cambió su residencia, desde la casa de las Madres de la Caridad en el hospital Martín Icaza de Babahoyo, al Asilo San José de Barreiro, institución que en la década de 1960 llegó a albergar hasta a 386 personas.

Cerca de cumplir 81 años de edad, el 29 de julio de 1969, falleció el apóstol padre Marco Benetazzo en su amado asilo de Barreiro. Fue muy querido allí y en Babahoyo, pues desde su llegada providencial para oficiar como sacerdote, a solicitud de las madres de la Caridad del hospital Martín Icaza Roldós, se dedicó a ayudar al prójimo, en especial a los más necesitados.

En Italia, su sobrino Enrique Benetazzo se casó con Iselda Siviero, para viajar a Ecuador con el encargo familiar de retornar con el padre Marco, por su precaria salud. Llegaron a Ecuador en 1951 y ante las largas que él daba a su retorno, la pareja también se radicó en Babahoyo, donde tuvieron un aserrío y después una hacienda. En su hogar procrearon tres hijos, Marco, Luis y Enrique, habiendo sido Luis, quien me facilitó los datos biográficos para poder rendir homenaje al padre Marco.