Taiwán tiene 23,5 millones de habitantes y solo 1.067 casos positivos de COVID-19 y 11 fallecidos, con escuelas funcionando, con eventos deportivos, y sin nunca haber impuesto ningún tipo de confinamiento. Con esta introducción, las epidemias mundiales deberían reflejar el espíritu de cobertura sanitaria universal: “Sin dejar a nadie excluido” que es uno de los principios por los que vela la OMS, sin importar los factores políticos y procurando el derecho a la salud para los 23,5 millones de taiwaneses, a fin de asegurar la salud pública mundial. En el mundo actual solo se puede garantizar el bienestar de la humanidad a través de una completa y estrecha cooperación, sin excluir a nadie, con el fin de enfrentar los nuevos retos que las enfermedades y virus suponen para la seguridad sanitaria mundial. Al mismo tiempo, Taiwán, con su frase “Taiwán puede ayudar y Taiwán está ayudando”, se ha convertido en una insignia a seguir para la población epidémica mundial, apoyando con diferentes tipos de donaciones de mascarillas, insumos médicos, kits alimenticios, tecnologías para el mundo entero. Por ello la OMS debería encontrar una forma adecuada para lograr que Taiwán participe progresivamente en todas las reuniones y actividades de la OMS, permitiendo así aportar eficientemente en esta etapa mundial de pospandemia.

Miguel Ruales Galarza