Hace cinco años, este venezolano fijó su residencia en México. El año pasado, Eduardo Rodríguez, estuvo en Ecuador, donde participó en el seriado Sí se puede, el dramatizado de Ecuavisa que se estrenará el 27 de julio. La telenovela cuenta la historia de la primera selección de fútbol del país que clasificó a un Mundial de Fútbol, específicamente el de Corea-Japón 2002. Entre los jugadores de la época, destacó Agustín Delgado, más conocido como el Tin.

El caraqueño lo caracteriza con el personaje del ‘Kin’ Delgado y cuenta su experiencia. “Esta oportunidad fue mágica, es mi primera vez en televisión, y sorteé muchas dificultades porque justamente tramitaba la renovación de los papeles de mi residencia en Ciudad de México y coincidió con mi viaje a Ecuador”.

Cuenta que en Ecuavisa no conseguían al actor que dé vida al futbolista de la ficción, y a través de Henry Gaspar audicionó para el rol. Es así como consiguió el papel y tuvo apenas 25 días para prepararse. Lo curioso es que Eduardo juega muy poco al fútbol, pues en su país el baloncesto y el béisbol son los deportes más populares. Para caracterizar al Tin, cuenta que recibió el apoyo de sus compañeros de trabajo. “Fueron muy generosos conmigo porque reconozco que hubo escenas algo difíciles de lograr y repetimos, pero lo positivo es que las jugadas era coreografiadas y lo que hicimos fue aprenderlas para que las tomas salieran limpias”.

Para encarnar al popular delantero que luego incursionó en la política, dice que se le agregaron matices, por lo que no es un retrato totalmente fiel de Delgado, de ahí que se lo llame 'Kin'. Por tratarse de alguien más hermético y cerrado, dice que investigó más de él, explorando desde sus raíces hasta su lesión de espalda y cómo interactuaba socialmente con los demás. “Con todos estos elementos y herramientas, junto a los directores construimos al Kin, cuya historia será muy interesante y espero que agrade a los televidentes de Ecuador”.

Los comienzos de Eduardo no fueron precisamente como actor, aunque este siempre fue su deseo. “Tenía 15 años, quería estudiar actuación, pero mi familia no contaba con los recursos, pero por mi físico atlético surgieron propuestas para ser modelo. A la par, complací a mi padre con mi título universitario en Informática”.

Tras ingresar al grupo Rajatabla se sumergió en el teatro y posteriormente en el cine, pero es gracias al modelaje que ha podido prepararse y sostenerse como actor. “He podido viajar a otros países, me ha ido bien y justamente ahora desarrollo campañas comerciales para varias marcas en México”.