Ha sido el convicto Larry Hoover, un expandillero de Chicago, el encargado de volver a unir a Drake y Kanye West tras más de tres años de enfrentamiento. Desde el 2018, los raperos han tenido una mala relación que ha sido alimentada por indirectas en canciones y ataques en redes sociales.

Sin embargo, todo cambió cuando el lunes, se anunció que Kanye West había invitado a Drake a que lo acompañara en un concierto benéfico, realizado la noche de ayer, a favor de la libertad de Hoover que cumple una sentencia de 20 años de prisión. Dejaron sus diferencias a un lado y demostraron, una vez más, la popularidad que tienen logrando reunir a más de 70,000 personas en Los Ángeles.

El espectáculo, que inició con retraso de una hora y media, lo abrió Alice Marie Johnson, una excarcelaria que fue liberada gracias a la presión que le puso West a Donald Trump en un encuentro en la Casa Blanca en 2018.

“Larry Hoover cometió un error cuando tenía 23 años. Ese error no lo define. Cuando una persona va a prisión toda su familia va a prisión con él. Vivimos un sistema que no cree en la redención”, dijo a lo alto Johnson. Estas palabras ocasionaron la ovación del público que empezó a gritar “Liberen a Larry Hoover”.

El concierto fue transmitido por Amazon Prime y mientras ocurría, las redes sociales se llenaron de mensajes de los fanáticos de ambos artistas quienes catalogaron este encuentro como algo “épico” y “perfecto para acabar el 2021”. Drake y West enloquecieron a la audiencia cantando sus mejores canciones y sellando públicamente su amistad.