respirador artificial
La validación de los equipos se realizó en la clínica de simulación de la UEES.Cortesía

La UEES certificó los respiradores artificiales creados por la Espol

Ahora los equipos están listos para darle un uso comunitario. El precio promedio de cada uno no supera los $ 400

La Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES) validó en sus simuladores de la Escuela de Medicina, los respiradores artificiales creados por profesionales de la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), antes de probarlos en humanos.

Este proceso de análisis, que se dio luego de que la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) solicitara a la UEES realizar la validación, se llevó a cabo en la Clínica de Simulación de la UEES donde varios profesionales especializados como José Luis Verga, especialista en terapia intensiva, Pedro Barberán, decano de la Facultad de Ciencias Médicas UEES y Federico Moral, director ajunto de la UEESCLINIC, certificaron la utilidad del mismo para el uso comunitario.

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El proyecto denominado OpenVenti, busca crear una solución de bajo costo pero de alta calidad, que permita a los pacientes con casos severos de COVID-19 acceder a un respirador artificial.

El diseño, según se explica a través de un comunicado la institución, podría reproducirse en los países de Latinoamérica que tienen dificultad para importar respiradores.

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El propósito, como lo publicó en un reportaje anterior EXPRESO, radica en obtener un dispositivo cuyo valor esté entre los 350 y 400 dólares y que mantenga altos estándares de calidad, cumpliendo todas las certificaciones que exigen las organizaciones de salud para la seguridad de los pacientes.

El precio promedio de un respirador artificial en el mercado puede llegar a costar desde 3.500 hasta 100.000 dólares, haciendo difícil -como han hecho énfasis los especialistas médicos del país- su adquisición en centros hospitalarios de países menos desarrollados, como Ecuador.