Un estudio le pone cifras al impacto de la pandemia de la COVID-19 en el sector turístico nacional, así como en el comportamiento y preferencias de los viajeros.

Entre los resultados más llamativos está que quienes viajan han reducido el tiempo preferente de permanencia en los sitios de destino. Antes de la crisis sanitaria la principal opción era de dos a cuatro noches; ahora predomina solo una.

Asimismo, el destino ‘playa’ sigue liderando los gustos, pero ha descendido casi diez puntos, mientras que la ‘Sierra’ casi ha desaparecido. En su lugar ha subido el interés por sitios abiertos como ‘áreas protegidas’, ‘montaña’, ‘rural’ y ‘de aventura’, entre otros.

El estudio tomó dos meses y fue realizado por el Ministerio de Turismo y 14 universidades públicas y privadas del país.

Esa cartera de Estado ha estimado que, entre marzo y fines de julio, el país dejó de percibir 825,9 millones de dólares por turismo internacional, debido a las restricciones internas y externas adoptadas por los países para contener al virus.

Internamente, por los feriados nacionales no aprovechados, estima 113,5 millones de dólares perdidos por el sector.

Con el paso de los meses y la flexibilización de las medidas, vio la necesidad de contar con un estudio del comportamiento del turismo nacional en este contexto de crisis sanitaria, según explica Juan Sebastián Paredes, de la Dirección de Inteligencia de Mercados.

El objetivo del estudio era evidenciar el comportamiento del turista antes y después de la afectación de la pandemia, generar una línea de tendencia con respecto a las variantes, analizar cuáles son sus gustos y preferencias en cuanto a desplazamientos y destinos, y conocer la motivación principal que tendría para realizar un viaje turístico en lo que resta de 2020 y en el próximo año.

Con las universidades aplicaron 10.039 encuestas, una muestra representativa del país y de las correspondientes provincias a las que pertenecen esos centros de estudio.

Sobre los cambios hallados, Paredes dice que habría que realizar una investigación complementaria para precisar las causas. Pero, a su criterio, cree se pueden atribuir a la pandemia, pues tanto en la reducción del tiempo de estadía como en la elección de sitios abiertos, al aire libre y poco concurridos, se puede evidenciar la búsqueda de seguridad y de evitar el posible contagio del SARS-CoV-2.

Los resultados están siendo socializados con los operadores turísticos como hoteleros, agencias de viaje, restaurantes, guías, etcétera, para que adapten su oferta a esos aspectos.

Así lo reconoce Elizabeth Castillo, vicepresidenta de la Asociación de hoteles y hostales de la provincia del Guayas y gerente general de los hoteles Nevada, de Guayaquil y Playas.

Corrobora que hay esos cambios y considera que, en su caso, los hoteles deben poner énfasis en aplicar y promocionar sus protocolos de bioseguridad, que es ahora la principal motivación del viajero a la hora de elegir destino.

A ello agrega ofrecer descuentos especiales y armar paquetes promocionales pensando sobre todo en la familia, que sigue teniendo preferencia en cuanto a formas de viajar.

Pero si bien estos datos serán de utilidad para los operadores turísticos, también les advierten que la situación aún se mantiene crítica para este sector. Según el estudio, más de la mitad de los encuestados no prevé viajar por motivos recreativos en lo que resta de 2020. Y los que piensan hacerlo en los próximos días y meses, son los jóvenes. 

A continuación, un resumen de los resultados del estudio de comportamiento del turista nacional, en el contexto de la llamada nueva normalidad, marcada por la Covid-19.