No son solo el cerro o el Puerto Santa Ana los lugares que dejaron de tener guardianía privada estos meses de pandemia. En la lista entran parques, mercados, plazas y hasta el ahora emblemático Hospital Bicentenario.

EXPRESO conoce que 331 sitios administrados por el Municipio de Guayaquil esperan que se adjudiquen cuatro contratos de prestación de servicio de seguridad privada y guardianía, cuyos procesos fueron publicados en el portal de Compras Públicas entre julio y agosto de este 2020.

Allí se incluyen también las estaciones de la metrovía, por lo que la Fundación que administra el sistema debió contratar servicios provisionales hasta que el Cabildo adjudique los contratos.

Los papeles

Hay un contrato de $ 13,1 millones para 120 locaciones de la zona norte, que incluyen Puerto Santa Ana, Museo Municipal, Biblioteca Municipal, parque Centenario, Guayarte, entre otros; uno de $ 6 millones, que dará seguridad a 72 locaciones del sur, como el mercado Caraguay, y dos de $ 5,3 y $ 5,2 millones, que buscan resguardo para las estaciones de la metrovía del norte, sur y centro de la ciudad (ver infografía abajo).

En el contrato de las zonas del norte consta el área comunitaria del Puerto Santa Ana, pero no el cerro Santa Ana, en cuyas escalinatas EXPRESO realizó un recorrido y constató, de acuerdo a moradores como Blanca Reyes, que desde que se acabó el contrato, la delincuencia volvió al sector.

Aunque el Municipio haya asegurado, sin explicar el tema de la seguridad ni los contratos, que “18 agentes metropolitanos vigilan las inmediaciones de este cerro y otros, como el Carmen”, hasta hoy no se había dicho una sola palabra de la decisión de cesar la alianza anterior y, con ello, dejar sin guardias a más de 300 lugares.

Respuestas que no llegan

Hay repuestas que la alcaldesa Cynthia Viteri debe: ¿por qué cambiarán al proveedor de los guardias de seguridad privada?, ¿era inevitable dejar sin el servicio a algunos de los sectores en cuestión, en lugar de esperar una adecuada transición?, ¿qué medida de mitigación se dejó tras la ausencia de estos?, ¿cuántos agentes metropolitanos tiene Guayaquil hoy? y, de esa cifra, ¿cuántos debieron distribuirse en las zonas que están sin guardias privados y en qué afectó esa medida a la distribución?

Todas estas preguntas, y otras, fueron enviadas hace diez días a las tres jefas de comunicación que tiene el Municipio. Ninguna fue contestada, esto aunque estos días los boletines del Cabildo daban cuenta de la alta calificación en transparencia que la Defensoría ha adjudicado al Cabildo.

Uno de los contratos cesados es de mayo de 2018, cuando una comisión técnica municipal, bajo la administración de Jaime Nebot, dio el visto bueno al proceso de licitación de servicios LICBS-MIMG-012-2017, por $ 13’226.415,59, con vigencia de dos años.

Ante el silencio del Municipio en este proceso, EXPRESO consultó los contratos por adjudicar, que estaban en curso hasta el cierre de esta edición y dan algunas señas de la metodología a aplicar. Se puede, por ejemplo, hacer un cálculo de cuántos guardias llegarán gracias al estudio de presupuesto referencial incluido en los documentos del portal de Compras Públicas.

“Se considera una rotación del personal con modalidad de tres turnos para un puesto de seguridad de 24 horas, los siete días de la semana y los 365 días al año, lo que significa que se utilizan cuatro guardias, quienes trabajarán 8 horas cada uno por día, en diferente horario. En total cada guardia trabaja las 40 horas a la semana”, explica el documento.

Bajo estos parámetros, en 331 cuerpos de vigilancia se necesitarían 1.324 agentes de seguridad. Fidel Alarcón Vega, consultor de la Federación Nacional de Trabajadores de la Seguridad Privada del Ecuador, explica a este Diario que un agente de este tipo de contrato público puede tener un sueldo promedio de $ 600, lo que representaría un gasto mensual en salario sueldos de $ 794.400 al mes. Por dos años de contrato, se calcularía un rubro estimado de $ 19 millones en sueldos, de los $ 29,7 millones que costará el servicio a la ciudad. En dependencias particulares, los agentes ganan $ 404.

Alarcón Vega, que también es especialista en derecho laboral, advierte que, por lo general, en el sector privado se estipulan este tipo de parámetros laborales en el contrato, pero tiene conocimiento de causa de que no se respetan en la práctica, pues rotan a los trabajadores y los hacen trabajar no ocho sino doce horas al día.

En otro documento, el de las condiciones de la licitación, se precisa que el servicio incluye el personal, equipos de apoyo, armamento y en general los recursos materiales necesarios para la adecuada prestación del servicio, en las dependencias establecidas en los pliegos. Allí entrarían los diez millones setecientos mil dólares restantes.

En su enlace del 26 de agosto, la alcaldesa Viteri adelantó, dentro de los proyectos de seguridad, la instalación de cien cámaras con megáfonos ubicados en varios puntos de la urbe. De los contratos ahora en proceso de contratación, no hubo ninguna información.