“La paz se esfumó hasta en los buses de las urbanizaciones”
El mismo numero de robos de 2022, se registró en marzo del 2023 en el transporte público de La Aurora. Una cooperativa pondrá cámaras de vigilancia
Los asaltos dentro de los buses que recorren las vías internas de las ciudadelas de Villa Club, La Joya y Villas del Rey, es uno de los males que afronta la parroquia La Aurora, del cantón Daule, provincia de Guayas.
En marzo del 2023 se reportaron cuatro asaltos dentro de las unidades; una cifra similar que se registró de enero a diciembre del 2022.
Secuestros, robos en las paradas de buses e incluso sicariatos, se han presentado en las vías internas de las tres ciudadelas que están conectadas.
La paz en La Aurora está siendo perturbada por la delincuencia que ha comenzado a acechar la zona, aseguran los residentes, quienes consideran que la falta de policías ha tenido gran impacto en este panorama que los mantiene en constante zozobras.
“Solo hay una UPC y las rondas que hacen los uniformados siento que son deficientes...”, menciona Adrián Carvajal, habitante de Villa Club.
Quienes veían este transporte como una ruta segura, a diferencia de las líneas de Guayaquil, ahora pagan con mucho recelo y miedo el pasaje de 0,30 centavos, que los lleva desde las plazas comerciales de las urbanizaciones hasta la entrada de sus etapas habitacionales.
“Ya no se puede salir a trabajar o comer tranquilo, ni en mi propia zona, porque ahora cualquier cosa te puede pasar hasta en los buses de la urbanización que creímos seguros”, manifiesta Johanna González, residente de Villa Club, al reiterar que “la paz que sentía se esfumó hasta de los buses de las urbanizaciones”.
Asimismo, Jéssica, quien pidió guardar en reserva su apellido, relata que fue víctima en uno de los robos que se produjo dentro de las unidades hace dos semanas.
En todo el país hay inseguridad, pero en los paraderos, en el bus y plazas comerciales de esta zona se ha acentuado. En ningún lugar nos sentimos seguros.
“No fueron más de cinco minutos que duró todo esto. Pero lo sentí eterno; se llevaron mi celular, dinero y otras pertenencias que tenía a la mano. Todo esto es horrible, ya no se puede salir tranquilo y temo que todo empeore de aquí en adelante”, manifiesta.
Ante esta problemática, EXPRESO consultó a la subzona policial de Daule cuántos delitos se han reportado dentro de estas unidades de transporte y qué acciones está tomando la policía ante estos incidentes que suceden con frecuencia. Pero hasta el cierre de esta edición no emitieron respuesta a las consultas realizadas.
Dos cooperativas de transportes recorren la zona: Gonzalito SA que va desde Villa Club hasta Plaza Tía; y la Lojatrans que opera en La Joya y Villas del Rey.
Esta última compañía detalla que han reportado, solo en marzo de 2023, cuatro robos dentro de los buses internos de las ciudadelas. Pero no ofrecieron cifras del 2022.
No obstante, durante un recorrido realizado por este Diario, pudo dialogar con los conductores de la cooperativa, quienes señalan que la cantidad de asaltos en estos vehículos no superaron los cinco desde enero a diciembre del año pasado; es decir, una cantidad similar a la registrada para marzo del 2023.
Entre las acciones a tomar, desde la cooperativa, señalan que ya han hablado del tema con la policía. La compañía de transporte colocará cámaras en puntos estratégicos, en los alrededores de Plaza Tía y en la etapa Esmeralda de La Joya, para identificar y disuadir a los delincuentes.
Muchos optamos por vivir aquí por la calma, pero ahora me siento insegura. No puedo ir tranquila al trabajo, porque hasta aquí te quieren robar en los buses.
“Lo que necesitamos con urgencia es más seguridad en la zona. De lo contrario, de nada habrá servido cambiarme desde Guayaquil para alejarme de la inseguridad, si acá el ambiente también se torna peligroso”, advierte Valentina Landa, quien antes vivía en el norte del Puerto Principal y ahora es habitante de La Joya.
Los moradores y conductores del sector aseguran que la presencia policial es baja en las vías internas de las tres urbanizaciones de La Aurora, Daule. Y la única Unidad de Policía Comunitaria que existe, es insuficiente para controlar todos los hechos delictivos que se presentan con frecuencia y a cualquier hora.
“Rara vez observo a un policía en las calles, vigilando y cumpliendo su función. Sin embargo, siempre los veo paseándose por Plaza Tía. Necesitamos agentes más atentos a las necesidades de seguridad de los ciudadanos y los transportistas”, señala Javier Ochoa, conductor de una de las líneas asaltadas en el mes de marzo.
Esta preocupación que ha invadido a todos los habitantes de las tres urbanizaciones ya lleva algún tiempo, puntualizan los residentes.
