La Coordinación Zonal 8 - Guayaquil, Durán y Samborondón - del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), la Junta Cantonal de Protección de Derechos y la Unidad de Investigación de la Policía Especializada para Niños y Adolescentes (Unipen), adoptaron medidas de protección para cinco niños del recinto Cerecita, ubicado en el kilómetro 58 de la vía a la Costa, quienes fueron trasladados a casas de acogida de Guayaquil.

Los menores fueron hallados en estado de desnutrición, en un mismo ámbito familiar. La acción conjunta se produjo con el objetivo de precautelar la seguridad e integridad de cada uno de los infantes, quienes actualmente tienen edades comprendidas entre los 2, 7, 9, 12 y 14 años; mientras las autoridades judiciales y policiales proceden a investigar una supuesta vulneración de derechos dentro de casa.

Como parte de las medidas de protección, se procedió a llevarlos hasta uno de los centros hospitalarios de la ciudad para que reciban las respectivas valoraciones médicas a nivel público, en donde se pudo determinar problemas de desnutrición y otras afectaciones de salud, así como la condición de discapacidad de uno de los menores de edad.

En Ecuador, 1 de cada 4 niños y niñas menores de 5 años sufre desnutrición crónica. La situación es más grave para la niñez indígena: 1 de cada 2 niños la padece y 4 de cada 10 presentan anemia, según la Unicef.

La entidad explica que la desnutrición condiciona el pleno desarrollo de un niño y deja huellas para toda la vida. Los niños que la padecen tienen más probabilidades de convertirse en adultos de baja estatura, obtener menos logros educativos y menores ingresos económicos durante su edad adulta. Esto tiene un impacto, no solo a nivel individual, sino que afecta el desarrollo social y económico de las comunidades y los países.

De acuerdo con la Subsecretaría de Protección Especial del MIES, la política de protección especial enfoca sus programas y servicios para los niños y adolescentes cuyos derechos han sido vulnerados o amenazados, implementando acciones de atención psicosocial, legal y de cuidado; así como de restitución de derechos, mediante la garantía de acceso y permanencia en servicios que posibilitan su ejercicio.

Cabe mencionar que el servicio de Protección Especial cuenta con cinco modalidades que permiten brindar una atención especializada según las necesidades de cada usuario: acogimiento familiar, acogimiento en familia ampliada, acogimiento institucional, erradicación del trabajo infantil y erradicación de la mendicidad. 

Aunque falta determinar la vulneración de los derechos de los niños encontrados, el problema de la desnutrición no se lo puede minizar, porque según explica la Unicef, los niños con desnutrición crónica durante los primeros dos años de vida y que aumentan de peso rápidamente en la niñez corren más riesgo de contraer enfermedades crónicas en el futuro como hipertensión arterial, diabetes y enfermedades cardiovasculares.