Alarmante. En la ciudadela Los Ceibos, el robo a carros ha subido este año un 67 % y a personas, un 18 %, según cifras de la Policía. La ciudadanía intenta resguardarse tomando medidas, invirtiendo más en seguridad; pero la delincuencia también cambia de estrategias. Los moradores sienten que todo esfuerzo resulta inútil. Pero prefieren respirar profundo y no dejarse vencer. Preparan nuevas acciones para recuperar la seguridad en la zona.

La situación aterra a los vecinos. Comentan que dar una vuelta por el sector les genera sobresaltos. “A un amigo le robaron la bicicleta”, contó el residente Jaime González.

Ni siquiera sienten tranquilidad al salir a comer a negocios del sector. La semana anterior, Diego Jaramillo llegó a las 20:30 a un restaurante en Plaza Ceibos y estacionó su carro en la parte de atrás, en una cuadra donde había otros automotores y bien iluminada, pero eso no detuvo a delincuentes, según el video que quedó como prueba del robo.

“Ese día fui a comer y cuando salí a las 22:00 ya no estaba mi carro. He puesto la debida denuncia y por eso tuve acceso al video de la cámara de seguridad. Allí se ve que a los 15 minutos que llegué se baja una persona de un Spark celeste, con gorra blanca, y en menos de dos minutos abrió mi carro y se lo llevó. Ahora ni siquiera se puede salir a comer tranquilo”, lamentó Jaramillo.

Pero no es el único caso. Cuando EXPRESO visitó la urbanización para conversar con los lugareños sobre la inseguridad de la zona, más ciudadanos contaron de otros robos. “A mi tío se le llevaron el carro, estaba estacionado al pie de su casa. A los pocos días lo llamaron y le dijeron que si les daba 2.000 dólares le entregaban el vehículo. Lo acompañé hasta Manabí, mi tío entregó el dinero en medio de un libro y no le devolvieron el auto”, relató Ernesto Cantos, ciudadano que ese día circulaba por Los Ceibos.

Así mismo, el taxista Luis Icaza contó que él vio cuando en uno de los semáforos de esta ciudadela se bajaron unos delincuentes y con ametralladora en mano obligaron a la conductora a salir del carro y se lo llevaron a toda velocidad.

Sobre los dos delitos que se han incrementado: el robo a carros y a personas, el jefe de operaciones del distrito Los Ceibos de la Policía Nacional, mayor Marlon Pozo, dijo a EXPRESO que están trabajando en nuevas estrategias con la comunidad. Indicó que con las acciones aplicadas hasta ahora, lograron reducir otros cinco delitos, como son los robos a casas, a negocios, de accesorios de carros, motos y muertes violentas. Incluso se pudo parar a tiempo la extorsión. “Delincuentes llamaron a una vivienda y contestó la asistente de la casa, y le dijeron: ‘Saca las joyas de tu patrona que las necesita urgente’. Ella respondió: ‘Aquí nadie usa oro’. Entonces la animaron a buscar algo de valor. Pero a tiempo llegaron los dueños de la casa y nos avisaron. Hemos advertido de esto a la comunidad, porque este tipo de extorsión se repitió en otra familia, y logramos detener las llamadas de extorsión al instruir a los habitantes”, contó Pozo.

Javier Rosero, presidente del comité de Los Ceibos, se concentró en explicar que tienen una nueva estrategia que, luego de socializarla, enviarán al Municipio de Guayaquil. Pero prefirió no dar detalles hasta que el proyecto se ejecute. Aunque advirtió que habrá puntos que se mantendrán en reserva, porque se trata de tácticas para hacer frente a la delincuencia.

Lo que sí compartió fue que cuando sufrieron un aumento de los robos a casas, se dieron cuenta, mediante un estudio, de que los delincuentes se disfrazaban de chamberos, un problema también publicado por EXPRESO en artículos anteriores. Entonces, junto a la Policía hicieron un listado de quienes sí son recicladores y hasta les compraron unas chompas que permite identificarlos. “Así, cuando vemos a uno sin la chompa, llamamos enseguida a la policía”, explicó Rosero.

Los planes también incluyen instalar más cámaras que permitan visualizar bien el entorno y a las personas, y que el sistema esté vigilado por alguien que avise a los policías.

Aunque ha bajado el índice de asaltos a los negocios, según cifras de la Policía, eso no significa que no se produzcan. Días atrás robaron en uno y esto hizo que los habitantes se sientan aterrados por la inseguridad.