Un choque múltiple, agua estancada, congestión y semáforos intermitentes son algunos efectos de la lluvia de más de seis horas que cayó ayer en Guayaquil.

La colisión fue en la 13 y Colón. Un carro se volcó, dejando un herido leve y un detenido, según indicó la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM).

Los comentarios de los ciudadanos en redes sociales y el anuncio de que hay condiciones para que ocurra un aguaje en el feriado de carnaval, llevaron a las autoridades a pronunciarse.

El anuncio oficial fue que los efectos de la lluvia de ayer fueron leves, aunque la comunidad en las redes sociales tiene otra percepción, empezando porque la congestión del tráfico provocó que el tiempo de viaje se duplicara, lo cual es un factor que abona al caos en una urbe comercial.

Esta situación hizo que los taxis formales, los ejecutivos y los de las aplicaciones incrementaran la tarifa. Por ejemplo, una carrera desde el Mall del Sur hasta la Universidad Católica en un día normal cuesta cuatro dólares, pero por la lluvia y el tráfico hubo un aumento de dos dólares. Otro ejemplo: desde la cooperativa Quisquís hasta Plaza Ventura por lo general se pagan dos dólares, pero ayer pedían hasta cinco dólares.

Es verdad que el agua no provocó una inundación, pero sí acumulación del líquido, que empapó los zapatos de más de un ciudadano.

A esto se suma que algunos semáforos dejaron de funcionar. Bajo la percepción de los ciudadanos, la lluvia provocó problemas, pérdida de tiempo y gasto adicional de dinero, como lo plasmaron en las redes sociales.

Pero hay que ver otra visión, la de las autoridades. Allan Hacay, director de Gestión de Riesgos del Municipio de Guayaquil, indicó: “No se han producido situaciones importantes de acumulación de agua que puedan representar un peligro o generar incidentes de tipo inundación”.

En cuanto al agua estancada, Ilfn Florsheim, vocera de Interagua, manifestó que los sistemas estaban complemente operativos y como la marea del río no estaba alta, el agua bajaría con rapidez.

Estas declaraciones se dieron a las 11:00, en un primer reporte que se emitió por la lluvia. La voz que mostró la vulnerabilidad de la ciudad fue la de Andrés Mendoza, presidente de Emapag.

Mendoza explicó que Guayaquil está a cuatro metros sobre el nivel del mar “y esta situación nos hace vulnerables”, sin embargo hay un plan invernal que se lleva adelante.

En cuanto a los semáforos intermitentes, esa situación se presentó en varios lugares de la ciudad. La Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) en las redes sociales advirtió de la situación en: Parra Velasco y Agustín Freire, Riobamba y Manuel Galecio, Lorenzo de Garaycoa y Alcedo, Lorenzo de Garaycoa y Ayacucho, Huancavilca y Leonidas Plaza, y Seis de Marzo y Ayacucho. Así mismo, se indicó que a la brevedad posible fueron enviados agentes de tránsito a cada punto, dado que esto aumentó la congestión de tráfico.

La conclusión de todas las autoridades es que los efectos fueron leves. Sin embargo, en las redes los comentarios mostraron las molestias que vivió el ciudadano. Subieron fotos en las que se veía los pasillos de la Bahía con agua estancada y vecinos en los barrios retirando basura de las alcantarillas, para destaparlas y que el líquido no se acumule en las calles.

Christian Suzuki, un ciudadano, comentó en Twitter: “Si algún día llegara a nevar en Guayaquil la ciudad se paraliza, con lluvia aumenta la imprudencia al volante, no imagino con nieve”. En un recorrido hecho por Diario EXPRESO, se vio que hasta la falta de tapas en la calle se vuelve un peligro. Por ejemplo, una moto, por esquivar un hueco, por milímetros no fue rozada por un carro.

Lo mejor es tomar las debidas precauciones y conducir con cuidado. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) advierte que hoy sábado lloverá desde la 01:00 hasta las 10:00. El domingo 23 el aguacero será de 07:00 a 10:00. Y el lunes 24, desde las 04:00 hasta las 10:00.

En las redes los más bromistas crearon memes: “Habla San Pedro: ¡Y con esta lluvia doy por inaugurados los carnavales!”.

Unos 50 barrios de El Oro afectados por inundaciones

A María Reyes, no le queda más que refugiarse en las lágrimas, después de ver que la mayoría de sus cosas se mojaron debido a la intensa lluvia que soportó Machala la noche del jueves y la madrugada del viernes.

Toda su familia no salió ayer a trabajar para ayudar a sacar el agua que había ingresado a la sala, cuartos y hasta la cocina.

Y es que, la capital orense soportó alrededor de 10 horas de intensa lluvia que estuvo acompañado de truenos y relámpagos.

Fueron al menos 50 barrios que se inundaron completamente. El norte, centro y sur de la ciudad estaban completamente anegados, impidiendo el traslado de los ciudadanos.

Las alarmas de emergencia de los carros del Cuerpo de Bomberos empezaron a sonar muy temprano, pues las llamadas al ECU 911 de Machala eran continuas de familias que estaban perdiendo sus enceres producto de la inundación.

“Mi refrigeradora, cama, cocina, casi todo se me ha mojado”, dijo Fanny Paredes, quien habita en el barrio Los Vergeles sector D, al norte de la ciudad.

La mañana de ayer se activó el Comité de Operaciones Emergentes (COE) cantonal, el alcalde Darío Macas, se encontraban evaluando la situación y dijo que el aguacero de la noche del jueves y madrugada del viernes, “es uno de los más fuertes en los últimos 10 años”.

Uno de los puntos más críticos es el canal denominado ‘El Macho’, que atraviesa de este a oeste la ciudad, en las riberas del caudal habitan más de 80 familias quienes están en peligro que se desplome su casa.

Evacuados

Según el alcalde, tres familias han sido evacuadas ante el peligro que su casa se desplome y que puedan electrocutarse ya que se reportó caídas de cables de alta tensión.

La calle Buenavista y 8va norte, resultó una de las más inundadas, pues prácticamente el carretero quedó cubierto por el agua, sin que haya un buen drenaje del alcantarillado. “Hay que salir porque el canal empieza a subir y se inunda toda la casa”, dijo uno de los evacuados.

Según el ECU 911, entre los eventos más relevantes se encuentran los ocurridos en el cantón Portovelo, donde un deslizamiento de tierra de aproximadamente 70 metros lineales bloqueó parcialmente la vía Salatí – Ambocas a la altura del Km 20, por lo que de forma preventiva el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) decidió cerrar la circulación vehicular por la zona.

Por otra parte, en el cantón Santa Rosa calles José María Ollague y Edmundo Chiriboga, una familia fue evacuada de su vivienda tras desplomarse el techo e ingresar agua por distintas partes. Para coordinaron con personal del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias (SNGRE).