El pasado 26 de agosto, desembarcaron sin problema alguno sobre las orillas del islote El Palmar y caminaron sobre su superficie y hasta se brindó una rueda de prensa. Esta vez, la prefecta del Guayas, Susana González, volvió al lugar, ubicado en la confluencia de los ríos Daule y Babahoyo, otra vez acompañada de un grupo de periodistas, entre los que estuvo un equipo de EXPRESO; pero ahora el recorrido fue más amplio.

La primera vez la travesía fue, en su mayoría, en canoa y se logró desembarcar en los alrededores de esa superficie sólida, formada por el sedimento que durante más de 50 años se ha acumulado. Ayer, el recorrido fue similar. Sin embargo, al registrarse la cota del río más baja del año, se logró caminar 45 minutos por el banco de arena; que se iba solidificando de a poco. Y es que lo parecía, en un inicio, ser tierras movedizas, en cuestión de minutos y en unos puntos más que en otros, se solidificó a tal punto que parecía que el terreno era de piedra.

En el lugar, donde solo retumbaba el trinar de las aves que tomaban una siesta o sobrevolaban el islote El Palmar, repleto de vegetación -razón por el que se dragará solo sus alrededores, cuya sedimentación alcanza los 6’250.000 metros cúbicos de arena; González se refirió al estado en el que se encuentra el proceso.

Aseguró que fueron 67 empresas, entre nacionales y extranjeras, las que se mostraron interesadas y participaron en este proceso, que fue subido al portal del Servicio Nacional de Contratación Pública (Sercop) el pasado 1 de diciembre; que la fase de preguntas de los oferentes finalizó el 8 de diciembre anterior, y que el límite para las respuestas y aclaraciones fue asismismo el 16 de este mes.

“Ahora ellas tienen el plazo para presentar su propuesta hasta las 14:00 del 27 de enero. A las 15:00, ese mismo día, se determinará ya quién dragará el río. Noventa días después de suscrito el contrato, empezarán los trabajos. Es decir que de junio a octubre de 2022, ya se lo deberá estar haciendo”, señaló.

Durante la caminata, en la que el personal de la Prefectura pudo hasta armar bolas de arena que, de vez en cuando, se lanzaban unos a otros, mientras se fotografiaban; González aseguró jamás dejar de asombrarse con lo que ve, pese a que esta fue su décima visita.

“Cada vez que vengo, veo más bancos de arena. Esto es una inmensidad. Técnicos de otros países han comparado este lugar con un aeropuerto de seis pistas de aterrizaje. Esto, sin duda, es un monumento a la indiferencia del Estado”.

Como lo ha repetido en sus eslóganes, la prefecta hizo énfasis en que el dragado va porque va, y aclaró que este no será un intento más para ejecutar la obra. A la fecha, como ha venido publicando este Diario, han sido cinco los intentos, desde la administración del exprefecto Jimmy Jairala. En mayo de 2016 se convocó al primer concurso que fue declarado desierto. Una segunda convocatoria bajo régimen especial recayó en la empresa China Harbour. El 13 de enero de 2017, la compañía y la Prefectura del Guayas suscribieron el acuerdo que luego terminaron por mutuo acuerdo.

En diciembre de ese mismo año se convocó a un tercer concurso que también fue declarado desierto. En marzo de 2018 se convocó al cuarto concurso bajo régimen especial que recayó en el Servicio de Dragas de la Armada Nacional. Y una vez que el entonces prefecto Carlos Luis Morales asumió el cargo, terminó unilateralmente el contrato con la Armada Nacional. Luego de un proceso legal llegaron a la decisión de terminarlo por mutuo acuerdo. González asume la Prefectura y entonces reinició el proceso, que hoy canoeros como Víctor Intriago esperan que se lleve realmente a cabo.

“El río se ha secado y con ello la oportunidad de trabajar. Los peces se fueron... Ahora estamos buscando nuevos espacios para pescar, más profundos, más lejanos; aunque eso implique enfrentarnos a los piratas”, sentenció; mientras, como el resto, por instantes se hundía en el fango o caminaba firmemente sobre él.