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Uno de los postes inclinados está en la avenida Esmeraldas y José Vicente Trujillo.Miguel Canales Leon

Los 13 postes torcidos en los 4 kilómetros de la Esmeraldas

Cada vez que hay un temblor ceden más, según los moradores. El problema existe desde hace varios años.  Hay residentes que se cansaron de quejarse

Un temor constante sienten los peatones que circulan por la avenida Esmeraldas, que de sur a norte de la ciudad empieza en la intersección de la avenida José Vicente Trujillo. La vía tiene cuatro kilómetros y a lo largo de esta hay 13 postes inclinados y el pánico es que en cualquier momento se desplomen y afecten a los inmuebles, a las personas o a los vehículos, porque unos están vencidos hacia las casas y otros se inclinan hacia la vía.

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Diario EXPRESO hizo un recorrido por la avenida y pudo confirmar, por ejemplo, que en la intersección de las avenidas Esmeraldas y Trujillo el poste está torcido hacia la vivienda. “Este poste empezó a inclinarse hace unos cinco años, la empresa eléctrica en este tiempo ha sido sorda y ciega ante el peligro que esto representa”, manifestó EXPRESO Luis Floreano, residente de la zona.

Agregó que con los temblores que suelen ocurrir en la ciudad más se inclinan los postes, “pero en esta ciudad estamos acostumbrados a reaccionar a los sucesos cuando hay heridos y muertos y no para prevenir. ¿Dónde están las autoridades para que eviten esto?”, preguntó Floreano, vecino del poste ladeado.

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El poste que está inclinado en la avenida Esmeraldas y calle Francisco Segura.Miguel Canales Leon

Este Diario envió preguntas a la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL) después de que el equipo periodístico confirmó que, además de los postes inclinados, había hasta bases donde se ha caído el cemento y se ven las varillas. La entidad solicitó tiempo para ellos recorrer la avenida Esmeraldas y con base en ello respondieron que encontraron 12 postes en los cuales hay que hacer trabajos: seis postes de 11 metros de alto se deben aplomar; es decir, fijarlos bien, ya se han ladeado por el exceso de cables que tienen y porque con el paso de los vehículos hay cierto movimiento de los cimientos. Otros tres, de 11 metros de alto, se deben cambiar y tres, de nueve metros, también tienen que ser reemplazados.

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Los postes a sustituir, por haber perdido vida útil, están ubicados en las intersecciones Francisco Segura y la A, aquí hay dos inclinados; Bolivia, Portete y 4 de Noviembre.

Tras la queja de los habitantes, CNEL se compromete hasta el próximo 15 de diciembre a realizar los mantenimientos y cambios de los postes ya identificados.

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Aquí se ve uno de los postes que está ladeado hacia la vía.Miguel Canales Leon

Aunque los habitantes consultados indicaron que los postes torcidos son un peligro, la empresa CNEL manifestó que no. “Los postes no son peligro para los transeúntes; sin embargo, con la responsabilidad que merece la comunidad procederemos a mejorar la infraestructura”, señaló.

Pero para los ciudadanos eso es un juego de palabras. “Si no representan un peligro cómo es que aceptan que deben cambiar. Nadie reemplaza lo que no está dañado”, dijo Leonor Zambrano, residente.

Los recorridos para ver el estado de los postes deben ser constantes, no se debe esperar a que la ciudadanía alce la voz a través de los medios de comunicación y allí venir.

José Barzola

morador

Hay cuadras en las que el problema lleva más años y los vecinos se cansaron de pedir a la CNEL que realice el respectivo cambio. “Ya hasta me he olvidado de cuántos años lleva este poste inclinado en las calles Esmeraldas y la A. Uno hasta se acostumbra a vivir con el riesgo y hasta uno piensa que Dios dirá si muero aplastada por el poste o no”, comentó María Salas, moradora.

Los recorridos para el mantenimiento deben ser constantes y no esperar que la ciudadanía levante la voz, porque en Guayaquil hay temblores en cualquier momento y un poste torcido sí representa un riesgo, reiteró José Barzola, habitante de la zona.

Aparte de los postes torcidos, los moradores también piden que se revisen las luces, porque aseguran que algunas iluminan poco y aumentan la inseguridad.