Wimbledon, el torneo más elitista de todos, el más tradicional y exclusivo, es también el más unilateral. Así lo acusó la ATP cuando el torneo decidió este miércoles 20 de abril apartar a los tenistas rusos y bielorrusos del tercer Grand Slam del año.

Y es que Wimbledon tomó la iniciativa sin tener en cuenta la opinión de la ATP y apoyado, únicamente, en el Gobierno británico y en la federación británica.

Será la primera vez que el torneo prohíba la participación de tenistas por su nacionalidad en este conflicto, como ya hizo tras la Segunda Guerra Mundial. De ahí que la ATP calificó como “discriminatoria” e “injusta” la decisión, pues viola el acuerdo que la asociación tiene con Wimbledon. Ahora, la organización de tenistas se reunirá para decidir cuál es el siguiente paso a seguir

Con la medida, Wimbledon se deshace de 4 top 30 en el cuadro masculino, entre ellos un potencial ganador como Daniil Medvedev; Andrey Rublev, #8 del mundo, y Karen Khachanov y Aslan Karatsev. Tampoco estarán Anastasia Pavluychenkova, Daria Kasatkina, ni las bielorrusas Aryna Sabalenka, cuarta raqueta del ránking y semifinalista el año pasado, ni Victoria Azarenka, exnúmero uno y ganadora de dos Grand Slams.