El buen partido que Macará y Emelec protagonizaron el 11 de marzo en el estadio Bellavista, y que terminó igualado a un gol por bando, se vio empañado por el mal arbitraje de Marlon Vera.

Un penalti no sancionado a favor del cuadro local y un gol anotado con la mano en la puerta del visitante, dañaron el espectáculo del un choque que, sin embargo, le da al Bombillo el liderato de la LigaPro, gracias a los 10 puntos acumulados en las cuatro primeras jornadas, en las que se mantiene invicto. 

Luego de un primer tiempo intenso, pero con pocas llegadas sobre ambas porterías, la etapa de complemento presentó a dos equipos volcados completamente hacia la ofensiva.

Una falta de Segundo Portocarrero sobre Bryan Carabalí, le permitió a Facundo Barceló abrir el marcador y sumar el cuarto tanto en su cuenta personal. Era muy justo por lo que los azules hacían hasta ese momento.

Macará salió en busca de la paridad, dejando espacios para los peligrosos contragolpes de los eléctricos, cuyos delanteros no pudieron asegurar la victoria.

Fue justamente en un contragolpe, luego de que Cabeza perdiera una clara opción, que llegó el tanto de Jhon Santacruz, ayudado con la mano derecha, acción que el juez central no tomó en cuenta y permitió que el gol suba al marcador.

En los minutos finales Emelec se fue con todo en busca del tanto de la victoria, ingresando a jugadores como Joao Rojas, José Francisco Cevallos y Sebastián Rodríguez, quienes habían sido reservados para el choque ante este mismo rival por la Copa Sudamericana.

Al final el resultado supo a poco para los millonarios porque, pese a recuperar el liderato, podrían perderlo a manos de Barcelona o Liga de Quito.