Con cerca de un año en el banquillo del Imbabura, Joe Armas ha logrado imponer su estilo de juego con buenos resultados. De tan solo 26 años, es su primera experiencia como técnico en un equipo del fútbol profesional y la está aprovechando al máximo.

Pone en práctica los conocimientos adquiridos en las pasantías en las divisiones formativas de equipos como Ajax de Holanda o los españoles Atlético de Bilbao y Leganes. También fue asistente de Gustavo Moscoso en la Tricolor sub-15.

Su juventud se refleja en su rostro, alegre antes de los partidos, y que se pone serio cuando está al borde del campo.

Con el equipo gardenio ascendió el año anterior a la Serie B, está en media tabla del torneo y en la Copa Ecuador dejó en el camino a Guayaquil City. El martes 19 de julio enfrentará uno de sus mayores retos cuando reciba a Liga de Quito en el estadio Olímpico de Ibarra.

“Es especial y es un sueño, después de 12 años volvemos a jugar ante Liga. Sabemos que será un reto muy difícil, queremos que nuestro estadio se llene de fe”, comentó el estratega que es el más joven en dirigir en los torneos de la LigaPro.

Enfatizó que presentará su idea de juego ofensivo, pero con equilibrio para evitar sorpresas. “Iremos a competir desde el primero hasta el último minuto”, aseguró.

Armas resaltó que ante Liga de Quito buscarán estar a la altura y sumó refuerzos de experiencia como el arquero Edisson Recalde o el delantero Brayan de Jesús, para consolidar el joven grupo con el que inició en la Serie B.

“Tenemos muchas fortalezas”, avisó Armas, quien tiene en la mira dar un nuevo golpe a un equipo de la Serie A.

Por su parte, los albos llegan golpeados tras el empate en casa ante Deportivo Cuenca, y quieren recuperarse con la clasificación en Copa Ecuador. Los directivos albos se encontraban agilizando las gestiones para habilitar al arquero Alexander Domínguez y que quede a las órdenes del técnico Luis Zubeldía.