Las personas optimistas irradian buena energía, generalmente lucen alegres y sonrientes, y siempre ven el lado positivo de las cosas. Por eso se entiende que gocen de buena salud y de un sueño reparador. Así lo confirma un estudio de la Universidad de Illinois, Estados Unidos.

La investigación, en la que participaron 3.500 voluntarios (32 a 51 años), determinó que quienes miraban la vida positivamente dormían mejor, entre seis y nueve horas y existía un 74% menos probabilidades de tener síntomas de insomnio y somnolencia diurna.

A pesar de los resultados de la investigación, los autores no explican detalladamente el mecanismo exacto a través del cual el optimismo influye en los patrones de sueño. Consideran que la positividad amortigua los efectos del estrés, y, en estas condiciones, sin problemas en la mente, se descansa mejor.

La mala calidad de sueño es una preocupación de salud pública, ya que se relaciona con diversas afecciones que van desde estados depresivos, tristeza, ansiedad, hasta riesgos de obesidad, hipertensión y mortalidad, explica Rosalba Hernández, autora principal de esta investigación.

Las adversidades son parte de la vida, pero la actitud frente a ellas es lo que marca la diferencia entre quienes las afrontan y superan y que otras no lo consigan. Elige ser positivo para no solo dormir más y mejor sino para que estés saludable.