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Paola Vintimilla
A sus 48 años, Paola conserva una belleza exterior e interior.Karina Defas

Paola Vintimilla, su única verdad

Luego de su fugaz paso por la política, se reinventa en medio de la pandemia, con el mismo espíritu triunfador que la caracteriza

Franca y expresiva, es una mujer apasionada en palabra y acción. Comunicadora por excelencia, su notable trayectoria en los medios de comunicación la han mantenido en el ojo público por más de veinte años. Mientras que su desempeño en el voluntariado social es no menos remarcable, impulsando proyectos por casi tres décadas, a través de la Fundación ‘Reina de Quito’.

“La ayuda social es esencial para ser quien soy hoy en día. Me entenderán quienes se han dedicado a servir a los demás. La alegría y satisfacción son inmensas”. Y más allá, su fugaz paso por la política visibilizó su nombre en otros niveles como asambleísta nacional y candidata a la Alcaldía de Quito en las últimas elecciones seccionales.

Volver a los medios

Dejó la corona de Quito hace casi tres décadas pero hoy, a sus 48 años, el tiempo ha acentuado su belleza, con rasgos más interesantes y reales, acoge la madurez con orgullo y desenfado, al priorizar siempre su desarrollo interior.

Conductora y presentadora de televisión en varios espacios a nivel nacional, su destacada actuación la llevó a conducir ‘Historia Secreta’, en el canal internacional History.

“Tengo los mejores recuerdos de mi época en la televisión. Soy una comunicadora innata y me encantaría regresar en algún momento”.

A la vez, cuenta con una trayectoria en la radio, en el programa FM Mundo. “La radio tiene su magia y me gusta mucho la cercanía con la audiencia. Antes de la pandemia estaba por lanzar al aire un espacio nuevo de contenido variado y diferente que espero concretar”.

Servir desde la política

“La política es una oportunidad maravillosa de servir. Lástima que muchos no la vean así”, afirma. En su caso, fue debut y despedida porque la experiencia le enseñó que la corrupción no permite avanzar al país y que resulta frustrante no poder aprobar leyes necesarias para el bien de la comunidad por los engorrosos procesos legislativos. “Hay mucha corrupción, pocos son los que hacen política transparente en beneficio de Ecuador. En mi caso, no dejé de hacer lo que quería, aunque no logré todo lo que quería”. Sin embargo, la comunicadora se queda con la satisfacción del deber cumplido, entiende que esa etapa pasó y no volverá.

Planes y ayuda social

La exreina de belleza y comunicadora, actualmente forma parte de un emprendimiento inmobiliario junto a su hermana Mónica, a quien admira y respeta. Mientras, como miembro del voluntariado de la Fundación ‘Reina de Quito’, empuja, en estos tiempos de pandemia, para que la misión siga adelante apoyando a 120 niños que sufren de síndrome de Down y requieren de terapias diarias. “Los recursos de la empresa privada se han limitado y los eventos que hacíamos anualmente para financiar los proyectos se han quedado en pausa”, dice, con la esperanza de poder conseguir el apoyo necesario.

Paola Vintimilla junto a su hija
Paola Vintimilla luce feliz junto a su hija Victoria Guarderas.Karina Defas

Un corazón completo

Dos hechos dolorosos la marcaron y le hicieron entender el significado de la vida en muchos aspectos: perder a su padre inesperadamente a los 17 años, mientras vivía con él en Cuenca, y a su segunda bebé, próxima a nacer.

Casada desde hace 19 años con Esteban Guarderas, reconoce que su apoyo ha sido fundamental para cumplir con sus metas profesionales desde el inicio de la relación. “Mi esposo es un hombre de un corazón enorme, me apoya en todo, siempre está ahí para levantarme cuando caigo y para protegerme. Es un padre fabuloso y siempre tiene algo bueno y profundo que decir”.

Juntos han formado un hogar consolidado y estable con hijos formidables: los mellizos Mateo y Julián de 16 años, y Victoria de 15. Se suma Lisímaco Guzmán, de 23, hijo de su primer matrimonio, quien vive en Quebec. “De mis hijos aprendo cada día, son mi alegría y razón de ser. Estoy siempre donde me necesitan, apoyándolos y enseñándoles que la vida es una sola y que hay que vivirla con pasión, sin dejar de lado los valores y principios”.

Cara a cara

  • ¿En qué se ha equivocado? ¡Muchas veces! Pero aceptarlo y rectificarlo hace que los errores se conviertan en experiencias y sirvan para madurar y crecer en la vida. Acepto y valoro mis errores, sin ellos no sería quien soy.

  • ¿Qué significa para usted la belleza, considerando que el tiempo pasa inexorablemente? Cada nueva arruga debe ser asumida como lo que es, y no darle más importancia de la que tiene. Lo que sí debemos cuidar es esa belleza interior que debe reflejarse en el exterior.

  • ¿Qué anhela para sus hijos? Lo mejor que la vida les pueda dar, que sus sueños y metas se cumplan, que sean felices.

  • En este tiempo de pandemia, se han profundizado otros temas que son el reflejo de la nueva realidad. ¿Cómo lo mira usted? Creo que hoy valoramos cosas distintas. Un abrazo, un beso, se volvieron más deseados que nunca. Saquemos de esto lo mejor y apoyémonos para salir adelante.

  • ¿Cómo se ha adaptado a las circunstancias actuales? No voy a negar que me ha costado, y mucho, pero me he refugiado en el ejercicio y en la lectura.

  • ¿Tiene miedo? Sí, por eso tratamos de no salir, no sabes cómo te va a afectar la enfermedad. Esa incertidumbre asusta.

Personal

  • Casada con Esteban Guarderas.

    • Hijos: Lisímaco Guzmán; Mateo, Julián y Victoria Guarderas.

  • Estudios: Diseño de Modas en Capeipi.

  • Diplomado en Gobernanza y Liderazgo Político del IDE