La industria del turismo atiende en estos días a los viajeros que han llegado al país para ver a las ballenaa jorobadas, pero respetando las reglas dadas por las autoridades y fundamental que los turistas también estén informados de las normas que existen, para seguridad y cuidado del medio ambiente.

La temporada 2019 de avistamiento de las ballenas jorobadas (Megaptera novaeangliae) arrancó a partir de 12 de junio y estará vigente hasta el 30 de septiembre en la Costa ecuatoriana.

Los ministerios de Turismo y Ambiente realizan controles ambientales y de operación turística para esta temporada que se puede apreciar en las playas de Salinas, Ayangue (Santa Elena); Atacames (Esmeraldas); Santa Clara (El Oro); y, Puerto López (Manabí).

El avistamiento tiene sus reglas y recomendaciones, por ello que se requiere una constante socialización y capacitación a los operadores turísticos sobre las normativas ambientales, las técnicas de navegación y de observación de ballenas, con el propósito de garantizar la seguridad tanto de los turistas como la permanencia de los cetáceos durante el período de procreación.

Asimismo, esta actividad requiere de guías especializados que cumplan con normas y requisitos para preservar al máximo la tranquilidad de las gigantes del mar. Las ballenas arriban cada año luego de viajar algo más de 7.000 kilómetros desde sus áreas de alimentación en la Antártida y recorren las cálidas aguas ecuatorianas, donde además de aparearse, tener a sus crías y alimentar a sus ballenatos en los primeros meses de vida, seducen a miles de turistas que las visitan en esta temporada.

Cada año, Ecuador recibe turistas de países vecinos como Perú y Colombia; pero también de Estados Unidos, Europa y Asia, periodistas, investigadores y público en general seducidos por las impresionantes piruetas de las ballenas, las bailarinas del centro del mundo.

Una vez en aguas ecuatorianas, estos mamíferos ofrecen, con sus impresionantes saltos y singulares aletazos, un espectáculo para miles de turistas nacionales y extranjeros que visitan las zonas de observación. Lo que constituye un atractivo turístico.

Funcionarios de los ministerios de Turismo y Ambiente realizan la revisión técnica a las embarcaciones que hacen la actividad de transporte a los turistas para realizar la actividad de avistamiento en las diferentes provincias.

En el caso del Parque Nacional Machalilla, dispone de 32 personas que se encargan de la revisión técnica a las embarcaciones turísticas que salen hacia el área protegida. Es personal de guarda parques, técnicos biólogos, especialistas en fauna marina y rescatistas de ballenas, con el propósito de dar cumplimiento a las políticas de conservación y atender cualquier eventualidad con la fauna marina.

Los ministerios comparten un conjunto de recomendaciones, para que los guías de turismo y visitantes disfruten de este espectáculo con las garantías necesarias para vivir este contacto con la naturaleza.

Las entidades estatales sugieren tomar las siguientes recomendaciones:

- Las operadoras de turismo deberán contar con Registro de Turismo y Licencia de Funcionamiento.

- Las operadoras de turismo deberán tener una póliza de seguro para todos los pasajeros.

- Los pasajeros incluidos tripulación y guías deberán utilizar chalecos salvavidas.

- Guías de turismo, deberán tener vigente su licencia de guía y la tripulación tener la matrícula de la Autoridad Marítima.

- La aproximación de las embarcaciones debe iniciarse a 400m para ballenas y 200m delfines.

- Durante el avistamiento, se deberá mantener a una distancia de 10m con las ballenas y 50m con los delfines.

- Para la aproximación y alejamiento, la velocidad permitida de las embarcaciones será de 8 km por hora.

- Recordar que si una ballena se acerca a la embarcación, ésta deberá detener la marcha de la nave.

- Para el avistamiento de ballenas se considerará un tiempo de 25 minutos. Y si existieran crías 15 minutos.

- Durante el avistamiento de ballenas los pasajeros no deberán ponerse de pie, ni cambiar su ubicación en la embarcación.

- En el avistamiento de ballenas, los pasajeros no podrán lanzar desperdicios en el mar, ni realizar pesca, ni tener contacto físico.

Cabe recordar que el incumplimiento de la normativa para el caso de turismo, la Ley establece una multa de 1.000 a 5.000 dólares.