El 28 de agosto finalizó el plazo otorgado a la Refinería del Pacífico (RDP) en liquidación para que realice el análisis del proceso de calificación de sus acreencias. Cumplida esta fase, sus liquidadores harán el balance final y procederán al pago con un orden de prelación de acuerdo con el Código Civil.

Uno de los mayores acreedores es Petroecuador, por más de USD 1,1 mil millones, señaló la petrolera estatal en un comunicado.

La RDP entró en liquidación en marzo del presente año y el plan de trabajo de ese proceso contempla una duración de 324 días. Petroecuador informó que, transcurridos cuatro meses y medio, esa empresa ha cumplido con el cronograma aprobado por la Superintendencia de Compañías, Valores y Seguros.

Los liquidadores también analizan la opción de rematar los bienes muebles e inmuebles, en lo que se incluyen terrenos, oficinas, campamento y villas, principalmente. La venta de ese patrimonio requiere del cierre de las licencias ambientales.

Según Petroecuador, la operación del acueducto La Esperanza es normal y se continúa con el abastecimiento permanente de los caudales de agua requeridos por los cantones manabitas de Manta, Montecristi y Jaramijó.