La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha denunciado este miércoles la "opresión institucionalizada y sistemática" de las mujeres en Afganistán bajo las autoridades instauradas por los talibán.

"Las mujeres afganas se enfrentan rápidamente al peor escenario que muchos temían", ha advertido, agregando que "las autoridades de facto siguen lejos de cumplir con sus obligaciones internacionales, tanto en la política como en la práctica, de respetar y proteger los derechos de las mujeres y niñas".

Bachelet ha indicado que la situación es "crítica", ya que más de un millón de niñas no acuden a las escuelas, por lo que se las priva de un futuro. También ha hecho hincapié en la obligatoriedad de cubrirse la cara en la vía pública, así como en la recomendación de uso del burka.

Hay que recordar que un portavoz ministerial explicó a principios de mayo que las mujeres deberán cubrirse el rostro en público, ya que de lo contrario sus 'guardianes' varones serán reprendidos o convocados por las autoridades y se arriesgan incluso a acabar en prisión, según recogió la agencia Jaama.

"Continúa la aplicación de una regla estricta sobre el hiyab; existen barreras para el acceso de las mujeres al empleo, incluso para las trabajadoras de las ONG que desempeñan sus funciones; no hay oportunidades para que las mujeres participen en la vida pública y política; y su libertad de movimiento ha sido severamente restringida", ha enumerado.

En este sentido, ha subrayado que "limitar la libertad de movimiento de las mujeres impacta negativamente en casi todos los aspectos de sus vidas, incluida la capacidad de las mujeres y sus hijos para acceder y participar en los servicios de salud, los medios de subsistencia y la ayuda humanitaria".