Mundo

EE. UU. prepara a un ejército de detectives del coronavirus

Dos universidades norteamericana alistan a los futuros rastreadores de los posibles contagiados. 

Pandemia-Coronavirus-EE.UU.-Rastreadores de contactos
RASTREADORES. Con la identificación de un caso de contagio de COVID-19, se inicia un proceso de rastreo de los posibles contactos.LEO RAMIREZ / AFP

Casi 70.000 personas en EE. UU. están preparándose para alistarse al ejército de rastreadores de contacto del COVID-19, una estrategia que las autoridades han considerado clave para mitigar la propagación del virus en las próximas fases de reapertura.

La tarea de estos rastreadores es, a primera vista, sencilla: tienen el objetivo de averiguar qué contactos ha tenido alguien que dio positivo por coronavirus, siguiendo unos protocolos bien estipulados que marcan el cómo, el cuándo y el porqué. Precisamente, esta detallada indagación es lo que decenas de universidades y centros educativos de EE. UU. están ahora enseñando a través de aulas virtuales para incrementar el número de estos especialistas en el mayor corto plazo posible.

Coronavirus Brasil

Coronavirus en el mundo: Contagios superan los 5 millones

Leer más

Esta práctica, que parece ahora novedosa para el público, tiene en realidad una larga tradición dentro de la investigación y el control de otras enfermedades, como la tuberculosis y el SIDA, por ejemplo.

Y esta reacción es gracias en gran parte al tirón de orejas que recibieron de los Centros de Prevención y Control de Enfermedades (CDC, en sus siglas en inglés). “Necesitamos acción inmediata: las autoridades deben escalar y capacitar a una gran fuerza de trabajo de localización de contactos para detener la transmisión de la COVID-19”, escribieron los expertos de los CDC a todos los estados del país.

Cuando el sistema sanitario detecta un nuevo positivo, un rastreador habla con esa persona, generalmente por teléfono, en lo que marca el inicio de una investigación del caso para determinar sus contactos cercanos, es decir, cualquiera que haya estado a casi dos metros durante 10 minutos mientras estaba infectado.

A continuación, estos ‘detectives’ se comunican con los contactos cercanos para informarles de una posible exposición y les recomiendan quedarse en casa para frenar la propagación del virus, cuenta la encargada de la Comunicación del Departamento de Salud de Washington, Amy Reynolds.

Vacunas contra el coronavirus. Imagen de stock de Pixabay. 21 de mayo de 2020.

Coronavirus: ¿Por qué se habla de una guerra de vacunas contra el COVID-19?

Leer más

No, los entrevistadores no revelan el nombre de la persona que puede haberlos expuesto al contacto cercano”, constata Reynolds, preocupada por las dudas de confidencialidad de esta iniciativa.

En el estado de Washington, ha sorprendido que, además de los profesionales del sector sanitario, más de 2.500 personas se hayan presentado voluntariamente para sumarse a este ejército estadounidense de rastreadores del coronavirus, que toma forma con el paso de los días.

UNA ACADEMIA VIRTUAL

La Universidad de California de Los Ángeles (UCLA) y el centro de esta misma universidad en San Francisco están a cargo de la ‘Academia de Capacitación Virtual del COVID-19’, un programa en línea que educa a los empleados públicos. Conectados desde sus casas, los alumnos asisten a un curso de 20 horas sobre los principios del rastreo de contactos y de las estrategias de contención de las enfermedades infecciosas.Las autoridades estatales y locales de EE. UU. han apretado el acelerador en las últimas semanas para empezar a reclutar y capacitar trabajadores de la salud del sector público, en su mayoría, que quieran convertirse en este tipo de ‘detectives del coronavirus’.

25 MIL EN EL REINO UNIDO

El primer ministro británico, Boris Johnson, prometió este miércoles que para el 1 de junio habrá en el Reino Unido 25.000 personas dedicadas a detectar y trazar cadenas de contagio de la COVID-19, como parte del plan del Gobierno contra la pandemia.

En su comparecencia semanal ante la Cámara de los Comunes, seguida por la mayoría de los diputados de forma telemática, Johnson afirmó que estos empleados rastrearán "los contactos de 10.000 casos nuevos al día", entre críticas de la oposición laborista de que el Ejecutivo ha fallado en el seguimiento y la contención del virus.

El líder del Partido Laborista, Keir Starmer, reprochó al Gobierno haber desatendido en particular las residencias de ancianos, al no hacer desde el principio un test a las personas mayores hospitalizadas para garantizar que estaban libres del coronavirus antes de darles el alta. "A nadie se le dio de alta para regresar a una residencia de ancianos sin la expresa aprobación de un médico", se defendió el conservador Johnson.

El programa de detección y rastreo de contagios, ayudado por una aplicación para móvil que se está probando, es clave en el plan del Gobierno para prevenir la propagación del virus, después de empezar la pasada semana el proceso gradual de desconfinamiento.

El Reino Unido es el país europeo con más muertes por la COVID-19, con 35.341 confirmadas por test, de las cuales se estima que al menos un tercio han ocurrido en residencias de ancianos.

Johnson informó hoy de que han fallecido hasta ahora 181 empleados del servicio nacional de salud (NHS, en inglés) y 131 de residencias de ancianos, que se han quejado en numerosas ocasiones de falta de equipamiento de seguridad adecuado.