A Jake Angeli, más conocido como "Q Shaman" o "QAnon Shaman" en el movimiento Qanon y de las teorías conspirativas, le puedes esperar "años y años" preso en una penitenciaría federal de Estados Unidos. Sí, su violenta incursión, junto a otros cientos de seguidores de Donald Trump, le podría salir muy cara.

Así lo consideró David Gonzales, portavoz de US Marshalls, una agencia de aplicación de la ley y una Unidad de policía federal perteneciente al Departamento de Justicia de Estados Unidos, según un informe publicado durante el fin de semana por el sitio web "AZ Central".

Angeli dijo a los funcionarios federales que viajó al Capitolio la semana pasada para "escuchar el llamado de su presidente [Donald Trump]", quien pidió a sus partidarios que se reunieran en Washington el día en que el Congreso certificaría su derrota electoral y el triunfo de Joe Biden. La protesta se convirtió en un violento motín que dejó cinco muertos, incluido un policía del Capitolio, sede del Legislativo.

Jake Angeli o Q Shaman" tiene 33 años y se entregó a agentes federales este sábado en Phoenix (Arizona). Acto seguido, fue arrestado por agentes del FBI por su papel en el ataque al Capitolio. El día anterior, el radical había concedido una entrevista a una radio local diciendo que no temía "ninguna acusación" y reafirmó que formaba parte de un "grupo de patriotas . Varios otros invasores fueron arrestados.

Enfrenta cargos que incluyen entrada violenta a un edificio restringido y conducta desordenada . Este lunes (1/11) se realizará una audiencia virtual en la que se solicitará la extradición del "chamán" a Washington. No se ha identificado el lugar donde está detenida Angeli.

También conocido como el "Lobo de Yellowstone" , Angeli se ha convertido en una de las figuras más representativas de la incursión violenta al Capitolio. Con sombrero y cuernos de piel de animal, sin camisa, con la cara pintada con los colores de la bandera de Estados Unidos y enarbolando la bandera del país, el activista rodeó las instalaciones del centro legislativo estadounidense y se hizo pasar por una estrella del pop en defensa de sus ideas conspirativas, tales como QAnon.

Qanon es, precisamente, una amplia teoría de conspiración y completamente infundada, la misma que dice que Donald Trump está librando una guerra secreta contra los adoradores del alto gobierno, o Gran Estados, las empresas y los medios de comunicación que siguen a Satanás y defienden una rede de pedófilos.