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Los caminantes hondureños que aspiran llegar hacia los Estados Unidos

Cientos iniciaron el miércoles desde San Pedro Sula una prueba de resistencia camino a la frontera del país de Donald Trump

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SAN PEDRO SULA. Miércoles, por la madrugada. Miembros de una familia llega hasta el área central de esta ciudad hondureña para sumarse a la caravana.ORLANDO SIERRA / AFP

Centenares de hondureños que aducen que no pueden seguir viviendo en su país por la falta de empleo y la inseguridad, emprendieron este miércoles una nueva caravana, la enésima que se organiza y sale de Honduras en el último año y medio., con la idea de llegar a Estados Unidos, para lo que primero tienen que cruzar Guatemala, a donde acaban de llegar hoy jueves.

Oficialmente no se sabe cuántos participan en la caravana, que partió de una central de autobuses interurbanos de San Pedro Sula, norte, la segunda ciudad más importante de Honduras.

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La masiva movilización salió de San Pedro Sula a las 04:00 del miércoles, a pie, pero después de una hora comenzaron a subirse a distintos tipos de vehículos, autobuses, camiones, contenedores y rastras, entre otros, aunque ninguno, al menos de los que pudo observar EFE en un recorrido de unos 260 kilómetros, llegó hasta Agua Caliente.

También fueron muchos los que caminaron varios kilómetros, entre hombres, mujeres y muchos niños, algunos recién nacidos, alternando con los trayectos recorridos en unidades de transporte. 

INSEGURIDAD Y FALTA DE TRABAJO

Las causas para abandonar su país que aducen los inmigrantes son la inseguridad y la falta de empleo, aunque muchos, que dicen haber tenido trabajos temporales, recalcaron que les pagaban "muy poco".

La mayoría de los inmigrantes son jóvenes, que podrían ser una importante fuerza laboral para su país, en el que no encuentran oportunidades de crecer a través de un empleo con salario digno.

Josué Molina, de 24 años, natural de Santa Bárbara, departamento occidental del mismo nombre, fue uno de los primeros integrantes de la caravana en llegar a Agua Caliente.

Con el cansancio reflejado en su rostro, Josué dijo a EFE que este es el cuarto intento, en tres años, que hace por llegar a Estados Unidos. En las dos primeras no pudo pasar de México.

Nosotros nos vamos de este país para poder mejorar, a veces no tenemos trabajo, ni cómo comprar la comida

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Migrante hondureña​

En la tercera, logró llegar en diciembre de 2019 a San Antonio Texas, sur de EE.UU., de donde fue deportado el 20 de ese mismo mes.

Josué, quien estudió hasta el sexto grado de educación primaria, subrayó que intenta irse por cuarta vez, siempre por Agua Caliente, porque en Honduras hay "mucha crisis. Uno desea salir adelante, pero no puede porque no hay trabajo".

El inmigrante lamentó dejar de nuevo a su familia, incluida su mujer y una hija, más siete hermanos, cinco hombres y dos mujeres.

Día Uno

En la masiva movilización, que partió hacia las 04:00, van muchas mujeres, niños y personas con discapacidad, entre ellos un hombre al que hace 10 años un tren le mutiló su pierna derecha en Saltillo, México, según relató a los periodistas en la estación de autobuses de San Pedro Sula.

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SAN PEDRO SULA. Desde la tarde del martes y en las primeras horas de la madrugada de miércoles, los caminantes comenzaron a concentrarse en un solo lugar, para desde ahí salir.ORLANDO SIERRA / AFP

La convocatoria a la caravana de este miércoles, de la que unos 200 inmigrantes salieron a pie el martes por la noche, con rumbo a Corinto, otro punto fronterizo con Guatemala, no la hizo ningún grupo social. Simplemente apareció en redes sociales y centenares se dieron por enterados.

La falta de un líder al frente de la caravana creó el martes confusión entre muchos de los inmigrantes, que al final se dividieron, unos viajando por Corinto y otros, la mayoría, por Agua Caliente. 

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Algunos adultos van en pareja otros son familias completas, padres con niños muy pequeños, lo mismo que jóvenes menores de edad, muchos de ellos sin ningún acompañante.

Decenas de efectivos militares vigilaron la terminal de autobuses durante toda la noche, mientras los migrantes dormían en las áreas verdes o aceras de la instalación del transporte terrestre que desde San Pedro Sula lleva a diferentes regiones del país.

Algunos de los inmigrantes se han subido a vehículos particulares con la idea de avanzar más rápido hasta llegar a Agua Caliente, donde las autoridades de migración y de la estatal Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) han reiterado que para ingresar a Guatemala los adultos bastan con que lleven su carné de identidad, mientras que los menores de edad obligatoriamente necesitan pasaporte y una autorización de sus padres para poder salir del país.

Día Dos

Más de 1.000 hondureños cruzaron hoy jueves el punto fronterizo de Agua Caliente e ingresaron a Guatemala, como parte de la caravana que el miércoles salió desde San Pedro Sula, norte de Honduras, con el fin de llegar a Estados Unidos.

Migración Honduras
CUCUYAGUA. Viajar en buses del transporte público, es una de las opciones más sencillas. Hay quienes van a pie o haciendo trasbordo en camiones de carga o camionetas.Gustavo Amador / EFE

Los inmigrantes, en su mayoría, jóvenes, entre hombres, mujeres y muchos niños, cruzaron el reten de la frontera corriendo y coreando la consigna "Fuera JOH" (Juan Orlando Hernández, presidente de Honduras). 

Minutos antes de que cruzara el masivo grupo, hacia las 08:00, lo hizo otro conformado por unas 200 personas.

Entre los que esperaban a pocos metros del edificio de aduanas y de una posta policial, uno comenzó a gritar varias veces "Vámonos", y comenzó la movilización.

"Hay muchos que se fueron sin hacer el control migratorio, aprovecharon irse en medio del relajo de gente que salió", comentó miembro de la Policía Nacional que platicaba con un empleado de una institución de protección civil asignado en Agua Caliente.

Al llegar a la aduana de Guatemala, autoridades de ese país le indicaron a los inmigrantes que tenían que hacer filas en orden y que serían atendidos.

A la llegada de los inmigrantes no hubo ningún incidente violento.

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PUERTO BARRIOS. Los peregrinos hondureños cruzan por poblado del departamento de Izabal, en Guatemala.ORLANDO SIERRA / AFP

A pocos kilómetros de la frontera, los inmigrantes pasaron un reten policial y militar, donde les exigían sus documentos personales y eran retenidos los jóvenes menores de edad, a quienes se les exige pasaporte.

Muchos hombres y mujeres no portaban su carné de identidad, ni pasaporte, aunque el segundo requisito no es necesario para ingresar a Guatemala, para los adultos, pero sí es requisito indispensable para todos los menores de edad, además de la autorización de sus padres.

Varios de los inmigrantes, antes de llegar a Agua Caliente, y otros que ya estaban en el sitio, dijeron a Efe que estaban "esperando más compañeros para irnos todos juntos". 

"Hoy nos quedamos aquí, mañana temprano salimos para los Estados Unidos", dijo a EFE uno de los miembros de la caravana al llegar en un microbús con otros compañeros de viaje al punto aduanero de Agua Caliente, entre Honduras y Guatemala.

El largo camino

Suchiate (México). La zona fronteriza de México con Guatemala se encuentra en total calma ante la posibilidad de una nueva caravana migrante de Hondura. “La Guardia Nacional y elementos de migración continúan realizando sus rondínes normales a orilla del Río Suchiate, hasta el momento no hay una orden de activar algún protocolo, se está trabajando normal. Está todo tranquilo hasta el momento, estamos al pendiente”, dice Sonia Eloina Hernández Aguilar, presidenta municipal de Suchiapa, estado mexicano de Chiapas.

A la orilla del Suchiate y en el puente que divide a México y Guatemala se han desplegado miembros de migración y de la Guardia Nacional

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LA RUTA.AFP

Hasta el momento, la vigilancia parece habitual dado que no ha incrementado el número de miembros de seguridad, lo cual puede suceder si comienza el nuevo éxodo desde Honduras.

Autoridades de los municipios de Tapachula y Suchiate señalaron que Migración continua realizando diversos operativos en hoteles, bares y cantinas de la región, así como en espacios públicos en donde a diario detiene a una veintena de indocumentados de diferentes nacionalidades.