El presidente Lenín Moreno señaló este 8 de abril que los problemas con la vacunación de adultos mayores en varios recintos de la capital se dieron por "falta de liderazgo" del personal del Ministerio de Salud, descartando así las acusaciones del ahora exministro Mauro Falconí quien aseguró que la descoordinación se debió a "interferencias" de la vicepresidenta María Alejandra Muñoz y de la gerenta de CNT, Martha Moncayo.

"Me alegro que las cosas cada vez estén saliendo de la mejor manera. Sin duda se han presentado dificultades, a veces fallas humanas, pero algunas que realmente resultan incomprensibles, más aún cuando ayer se intentaba inocular la vacuna a nuestros viejecitos de más de 90 años. Lastimosamente falta de coordinación, falta de liderazgo por parte del personal de Salud hizo que en un momento determinado esas vacunas no llegasen y si llegaron fueron ya fuera de tiempo a tal punto de que los viejecitos tuvieron que esperar varias horas hasta ser inoculados", señaló Moreno previo al inicio de la vacunación de militares que se iba a realizar en la primera división del Ejército Shyris en el Fuerte Militar "Epiclachima".

Moreno aprovechó la jornada para presentar al nuevo ministro de Salud, el exgobernador de Los Ríos y candidato a la Asamblea por Alianza PAIS, Camilo Salinas, quien aseguró que lo que sucedió el miércoles en Quito fue una "organización inadecuada" por "la falta de comunicación interna del funcionarios del Ministerio", de lo que, afirmó, "el presidente ya tiene conocimiento".

"Hemos tomado inmediatamente una solución al problema", agregó. Minutos más tarde el decreto que oficializa su cargo fue firmado por el presidente Moreno.

En otra entrevista, el ministro de Gobierno, Gabriel Martínez, señaló que, al contrario de lo que asegura Falconí, sí estaba planificado vacunar con Pfizer a los adultos mayores de Quito y que, tras un "cambio de última hora" realizado a las 2:30 de la madrugada, el entonces ministro dispuso que vacuna que se debía poner era la de AstraZeneca.

"La misma gerencia de CNT ha informado que había una planificación, que se estaba priorizando la vacunación de los adultos mayores con las dosis de Pfizer, por las especificaciones técnico-científicas de la AstraZeneca, la que está siendo utilizada para otros grupos que están en la fase 1", indicó Martínez. 

Falconí dijo por la mañana que sus decisiones siempre estuvieron sustentadas en "evidencia científica". "Todos en el mundo saben que científicamente las dosis de AstraZeneca están probadas. La EMA, la organización europea sanitaria, acaba de dar un último comunicado en el que dice que los beneficios todavía superan en mucho a cualquier tipo de circunstancias. ¿Por qué? Porque son vacunas probadas".

 "Aquí el criterio técnico científico en este país no está siendo escuchado de forma permanente. La evidencia está dada por parte de OPS, OMS", indicó.