Con una mezcla de eventos presenciales y virtuales Quito arrancó ayer el denominado Agosto Mes de las Artes, que en esta época reviste una doble importancia porque con los eventos se busca reactivar la ciudad, tras los meses más fuertes de la pandemia.

Son más de 150 las actividades que han sido programadas en diferentes puntos del Distrito Metropolitano de Quito. Esto incluye talleres y espectáculos de música, teatro, danza y literatura con los que la capital busca convertirse en el epicentro cultural del país.

El Mes de las Artes se inauguró con el taller presencial ¡A volar entre sueños, papeles e hilos! Que se desarrolló en el Museo del Carmen Alto, ubicado en el Centro Histórico de la ciudad. Según los organizadores, el objetivo de esta capacitación fue que tanto niños como adultos aprendan a elaborar las tradicionales cometas para que las pongan a volar en los parques y zonas altas de Quito, aprovechando los vientos del verano que se hizo presente con más fuerza el fin de semana.

Ese no fue el único objetivo. Además, se impartieron mensajes sobre las normas de seguridad a la hora de hacer volar las cometas y de bioseguridad en aforos para evitar la propagación de la COVID-19. Los trabajos con más creatividad recibirían premios al finalizar el taller.

En la tarde, un evento mixto (entre virtual y presencial) en el Teatro México denominado Proyecto Domingos Familiares cerró la primera jornada cultural. En este, se presentaron diferentes manifestaciones culturales de la ciudad.

En esta ocasión, las autoridades municipales dividieron en secciones la agenda de eventos para el mes de las artes: espacios culturales; eventos cívicos; y actividades en territorio.

En este último destacan eventos como el Asómate Ve que consiste que caravanas de músicos, danzantes y actores urbanos visitan los barrios de la capital, especialmente los periféricos. También, están los Quitunes que arrancan hoy desde las 10:00, entre las calles Venezuela y García Moreno, y se extenderán durante todos los lunes de agosto.

Para la conmemoración del Primer Grito de la Independencia también se han preparado eventos en museos y sitios históricos de la capital. Entre el 9 y el 10 de agosto se harán recorridos presenciales por la Cima de la Libertad.

En el Museo Interactivo de Ciencias, ubicado en el centro sur de la ciudad, habrá una noche de antorchas el 9 de agosto y en la Plaza de la Independencia se celebrará el Día de la Cultura. Todos estos eventos tendrán una modalidad semipresencial y podrán ser seguidos por plataformas virtuales.

El sector turístico es uno de los más afectados por la COVID- 19 en Quito y las autoridades locales y nacionales buscan los mecanismos de reactivación.

Danza para hacer frente a la inseguridad

Cansados de que los mecanismos tradicionales para combatir a la delincuencia y la inseguridad no den los resultados esperados, los moradores de dos barrios tradicionales de Quito optaron por cambiar la estrategia.

Los habitantes de San Blas y La Tola, zonas ubicadas en el centro de la ciudad, empezaron un proceso de recuperación del espacio público, pero de una forma singular: llevando el teatro, la danza y los títeres a las calles, lo que en su primera intervención ya provocó el deleite de las personas que circulaban por estos sectores.

Para Juan Carlos Rojas, presidente de barrio La Tola, es importante que estos eventos culturales se vayan reactivando en estos espacios públicos. Dice que últimamente, estos han sido tomados por la inseguridad. “Nosotros como vecinos, conjuntamente con Municipio y Policía Nacional estaremos vigilantes para reforzar la seguridad en estos sitios tan tradicionales y llenos de historia”, le dijo a EXPRESO.

Los vecinos disfrutaron y vieron con buenos ojos estas iniciativas. Luego de varios meses de confinamiento hubo emoción, algarabía y muchos aplausos por las presentaciones de las agrupaciones Cuyani, Jacchigua y Minka que deleitaron con sus coloridas coreografías a las personas que, pese a la pandemia, se dieron un gustito para dar unos cuantos pasos de baile tradicional.

A Rocío Narváez le sorprendió la llegada de los danzantes a la Plaza del Teatro, que por lo general tiene problemas de inseguridad por la presencia de personas en estado etílico y el servicio sexual informal que se ha incrementado de forma progresiva a raíz de la pandemia, pese a los controles que hacen las autoridades.

“Vengo desde Chillogallo (en el sur de Quito) y por lo general lo que se encuentra aquí es gente borracha y muy poca alegría. Creo que este tipo de iniciativas van a ayudar a las personas a relajarse luego de tantos meses difíciles”, señaló Narváez.

Este plan piloto tiene como objetivo irse expandiendo a otros barrios tradicionales de la capital con casas abiertas y mercados artesanales.