La afectación es peor de lo que se muestra y de lo que se denuncia. La falta de recursos en el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) pone en riesgo su sostenibilidad en el corto plazo y las cifras apuntan a un responsable: el gobierno central. Los estimados internos dan cuenta de una deuda total que supera los 14.144 millones de dólares.

No se trata solo de los aportes que no se han entregado para las pensiones de los jubilados. Aún faltan fondos para el seguro social y la atención médica de las amas de casa, para atender a personas con discapacidad, para afiliados con enfermedades catastróficas y para el chequeo médico de los jubilados. La deuda en el fondo de Salud asciende a más de 3.883 millones de dólares.

En ese monto se incluyen valores de años pasados y 131 millones de dólares que debían ser trasladados en este año. Eso no sucedió o, al menos, todavía no son transferidos a las cuentas del Seguro.

Un informe interno del IESS, al que accedió EXPRESO, muestra que la realidad no ha variado desde el último trimestre del año pasado. A los 3.883 millones deben agregarse 191 millones de dólares por la devolución del IVA y más de cinco millones de dólares que el gobierno debe entregar para financiar el seguro de desempleo. Hasta mayo, esa deuda tampoco fue cubierta.

En la lista de deudas que aún no tienen convenio de pago también están los más de 1.312 millones de dólares que corresponden a la aportación del 40 % que el Estado debe hacer a las pensiones de jubilación. De ese monto, 709 millones corresponden a lo no pagado en lo que va del año y 602 millones son el acumulado de años anteriores.

El saldo de deudas no negociadas se completa con cerca de 64,8 millones de dólares considerados ‘Otros Rubros’ de 2020. Ahí se cuentan recursos faltantes para cubrir el Seguro de Riesgos del Trabajo, el Seguro Social Campesino, entre otros.

La cifra sería mayor si se contempla el valor de Otros Rubros de años pasados. Ese indicador, sin embargo, no es revelado.

La factura no termina ahí. El Seguro cuenta con un registro de 8.752 millones de dólares por deudas pasadas que el gobierno aceptó y aseguró que pagará algún día. Ofreció bonos, certificados y abonos para cubrir ese rubro. Desde noviembre del año pasado, sin embargo, no hay nuevos desembolsos.

La mala noticia es que el gobierno del presidente Lenín Moreno no cuenta con un poco más de 14.000 millones de dólares para cubrir todos sus pendientes con el Seguro. Además, el Ministerio de Economía y Finanzas no está de acuerdo con todas las cifras presentadas en el informe.

El 1 de julio, el presidente del Consejo Directivo del IESS, Jorge Wated, envió una carta al ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez, para pedir el pago de los haberes. En la misma misiva pidió que cesen las constantes revisiones de cifras de los ítems de la deuda que pide el Ejecutivo.

La verdad es que entre cartas sin respuesta pública, revisiones de montos y facturas olvidadas, el Seguro Social tiene un hoyo de 14.000 millones de dólares y la posibilidad de no contar con recursos para pagar las pensiones del próximo mes. A diez días de quedar mal con sus jubilados.