Los sentimientos de angustia, temor, patriotismo y el impulso de valentía que inundaron en su momento a quienes combatieron en la Guerra del Cenepa, en 1995, han quedado en el recuerdo. Lo que los excombatientes ecuatorianos mantienen ahora en su mente es el sentimiento de orgullo por la paz obtenida y los beneficios de la nueva relación con Perú.

Javier Pérez Rodríguez, general de división y comandante general del Ejército, considera que Ecuador y Perú nunca antes habían tenido una mejor relación como la de este tiempo.

“Si bien hubo diferencias con el Perú, estas se resolvieron, gracias a los resultados que dio la victoria del Cenepa. Un hecho importante es que dos países que estuvieron confrontados en una causa común, ahora trabajen de forma conjunta en el desminado humanitario”, enfatiza.

Algunos de los militares que fueron parte de ese enfrentamiento, contaron a EXPRESO su impresión sobre las relaciones actuales del país, luego de más de dos décadas del conflicto bélico entre ambos países.

Jorge Tello, teniente coronel de Estado mayor y uno de los ocho condecorados con la Cruz de Guerra, recuerda, -como uno de sus combates más significativos-, el ataque a un helipuerto copado por tropas peruanas, durante la guerra. Aunque reconoce que aquel escenario fue necesario para defender al país y luchar por la paz.

“En la actualidad, podemos decir con certeza que las relaciones con el Perú son totalmente productivas y de paz. El conflicto del Cenepa fue ese impulso para alcanzar con dignidad esta paz que gozamos”, matiza.

De igual manera, a Carlos Villón, excombatiente, quien entró a la guerra siendo civil, le resulta imposible no recordar la gesta del Cenepa como un acto heroico, en el que él y centenas de militares fueron protagonistas.

“Me gusta, siempre me ha gustado la vida militar. Yo me uní al Ejército sin pensar en que luego tendríamos la recompensa de la paz”, acota.

Ayer, a las 10:00, se realizó una ceremonia especial por el aniversario vigésimo cuarto de la ‘Victoria de la Gesta del Alto del Cenepa’, en el Monumento al Reservista, ubicado en la ciudadela Sauces IX. Allí se condecoró a ocho excombatientes del Cenepa con la Cruz de Guerra; y se rindió homenaje a los 33 soldados caídos en el Alto Cenepa.

El resto de la jornada fue aprovechada por los excombatientes para recordar, junto a sus compañeros, aquella fecha cívica que, coinciden, dio como resultado las buenas relaciones que llevan actualmente los dos países.