Los industriales logran hacer retroceder el precio de la tonelada de la caña de azúcar. El Ministerio de Agricultura y Ganadería informa que, ante la decisión judicial que dejó sin efecto el Acuerdo Ministerial No. 047, se presentó la apelación pertinente y se espera fecha de audiencia para fundamentarla. Es importante subrayar que este acuerdo permitía mejorar el precio que los ingenios pagan a los productores de caña. 

"Somos respetuosos del marco legal y del sistema de administración de la justicia; pero lo resuelto en un juzgado de Yaguachi, perjudica directamente a cientos de pequeños productores y trabajadores zafreros. Insistiremos en acciones legales para proteger los intereses de los sectores más vulnerables de la cadena de producción", indica la Cartera de Estado en un comunicado.

Según el boletín los cañicultores e industriales del ramo, participaron en mesas consultivas en las que se logró un consenso sobre los costos de producción. Ese consenso sirvió para tomar la decisión de pagar un precio de $ 35,05 por tonelada de caña. Valor que se estableció en el Acuerdo Ministerial No. 047.

El Ministerio reitera que los actores que participaron en este acuerdo, contemplaron que el precio no había incrementado en los últimos siete años. Además, el incremento no supera el 10% del precio anterior. Antes la tonelada costaba 31,70 dólares.

“Este fallo judicial va en contra de los más necesitados de la cadena productiva de la caña de azúcar. Nuestros pequeños productores son los afectados con el intento de dejar sin efecto el Acuerdo Ministerial 047. Estas decisiones solo benefician al sector industrial y van en contra de los objetivos trazados por el MAG para mejorar las condiciones de vida y acceso a trabajo digno que queremos para los productores de nuestro país. Seguiremos defendiendo los intereses de quien no tiene voz, para buscar el desarrollo del campo”, enfatiza el ministro de Agricultura y Ganadería, Bernardo Manzano.

La Federación Nacional de Azucareros del Ecuador (Fenazúcar) días atrás dijo que el precio fue impuesto de manera unilateral por el Ministerio de Agricultura y Ganadería y que carece de sustento técnico, y representa un incremento de casi el 11 % que significaría aproximadamente 12 millones de dólares adicionales de egresos anuales para el sector agroindustrial, provocando la pérdida de competitiva frente a otros países de la región, además de un grave impacto financiero a los ingenios azucareros, especialmente a los de menor tamaño, y pone en riesgo no solo a las operaciones, sino a la sostenibilidad misma de la agroindustria y a los más de 38.000 empleos directos y 150.000 indirectos, según el gremio.

Por su parte, los productores también han defendido de que el precio ha estado congelado por varios años y que los insumos se han encarecido, por ejemplo la urea, por lo que están gastando más para sembrar.