“La mayor parte de las economías recuperaron sus niveles prepandemia, pero esto no es suficiente”, aseguró este 4 de octubre de 2022 el Banco Mundial, en su estudio ‘Nuevos enfoques para cerrar la brecha fiscal’, publicado ayer.

La economía ecuatoriana está en el grupo de los países que todavía no han logrado revertir el embate de la crisis económica causada por la pandemia de COVID-19, de acuerdo a las estimaciones del Banco Mundial.

El organismo señaló que Ecuador crecerá 2,8 % al finalizar en 2022. Con ello, el Producto Interno Bruto (PIB)del país habría alcanzado un crecimiento de 7 puntos en dos años tras el desplome de 7,6 % de 2020, el año marcado por el confinamiento de la pandemia.

Es decir, a la economía local aún le quedaría recuperar 0,6 puntos para volver a niveles de 2019, que se recuperarían en la primera parte de 2023.

La economía ecuatoriana debe crecer este año al menos en 3,6 % para recuperar lo perdido en la pandemia, pero ese resultado luce lejano. A solo un trimestre para cerrar el año, el Banco Central del Ecuador (BCE) estima un crecimiento de 2,7 %, incluso algo más abajo que la cifra que plantea el Banco Mundial.

De acuerdo a las cifras del multilateral, países de las Antillas como Bahamas, Barbados o Dominica tampoco lograrán alcanzar lo perdido en 2020. En el caso de América del Sur, Ecuador se convierte en el único país que no ha logrado revertir lo perdido, de acuerdo a las cifras del multilateral, que no considera a Venezuela entre sus análisis.

¿Cuál es la razón para una recuperación más lenta de Ecuador frente a los otros países de la región? Para Verónica Artola, exgerenta del BCE, el país afrontó una crisis económica sin precedentes, con pocas herramientas para recuperarse, como espacio fiscal para aumentar la ayuda a las familias de más escasos recursos.

Además, dijo Artola, desde 2014, Ecuador no está creando fuentes de empleo reales, lo cual ha complicado la situación económica del país.

Para el analista económico David Castellanos, el crecimiento lento de Ecuador era previsible debido al cambio de modelo económico de los últimos años, que estaba apalancado en la inversión pública y los altos precios de las materias primas, específicamente el petróleo en el caso de Ecuador.

La inversión pública es incipiente, dijo Castellanos, y todavía el sector privado no ha logrado tomar la posta. Aeso se suma el paro de junio pasado, lo cual también ha traído más incertidumbre para reactivar la inversión.

En días pasados, el gerente del BCE, Guillermo Avellán, aseguró que entre abril y junio la economía se desaceleró debido al paro del movimiento indígena. Por esa razón, la proyección de crecimiento para todo 2022 se ajustó de 2,8 a 2,7 %.

Y los próximos años tampoco lucen tan prometedores. El Banco Mundial estima una tasa de crecimiento de 3 % para 2023. Según la entidad, a escala regional, esos porcentajes son bajos y “no alcanzan para hacer mella en la pobreza o en el nivel de prosperidad”.

Además, esas proyecciones, dijo la entidad, son prácticamente idénticas a las observadas durante los 10 años anteriores a la pandemia. Todo esto sugiere, si no una trampa de crecimiento, al menos un desempeño “obstinadamente mediocre” para la región.

El diagnóstico

• Impuestos: América Latina recauda el 23,7 % de sus ingresos públicos con IVA, 13,2 % de los impuestos sobre las empresas, y 10,6 % de los impuestos sobre la renta de las personas físicas. Para los estándares mundiales, la carga del IVAes elevada, según el BM.
• Obras: El Banco Mundial señala la necesidad de abordar desafíos de larga data en términos de infraestructura, educación e innovación tecnológica y de gestión. La incipiente agenda verde mundial supone desafíos, pero también grandes oportunidades, dice la entidad. 
• Riesgo país: Si bien el riesgo país en la región ha sido moderado, las excepciones son los “dramáticos y bien conocidos aumentos en Argentina y Ecuador”, dice el organismo. En el caso de Ecuador, el indicador sobrepasa los 1.700 puntos.