La firma Carmigniani Pérez Abogados, contratada por la Bolsa de Valores de Guayaquil, luego de la Intervención de la Superintendencia de Compañías para realizar una auditoría de cumplimiento normativo en el Decevale, dijo que el “Decevale nunca ha recibido fondos del Isspol y jamás participó en las negociaciones entre esa institución y Jorge Chérrez o IBcorp. Tampoco ha tenido esos valores en custodia”. Por tanto, por cualquier distracción de esos títulos tienen que responder el propio Chérrez y los funcionarios del Isspol que decidieron invertir con él.

Ese informe refiere las irregularidades y falta de probidad de Luis Álvarez Villamar, gerente de operaciones de Decevale, por lo que hemos pedido visto bueno al Ministerio del Trabajo para terminar la relación, que causó los problemas que hoy enfrentamos, pues por su propia cuenta, y extralimitándose en sus funciones, suscribió documentos con Jorge Chérrez, en los que mal usando el membrete de Decevale, simulaba que este custodiaba valores del Isspol.

"Sobre esa base, el 29 de septiembre de 2020 informamos al Superintendente de Compañías que el “Directorio de Decevale… …ha iniciado un proceso para determinar responsabilidades en los hechos objeto de la intervención e implementar correctivos que permitan subsanar… …las faltas cometida por sus funcionarios en contra de los principios y normas que regulan su actividad"

A partir de ahí, señala Eduardo Carmigniani, el Decevale ha tomado acciones: Separación de Luis Álvarez Villamar por manifiesta falta de probidad. Adopción de normas de buen gobierno corporativo. Implantación de un nuevo manual de funciones y un manual de procedimiento operativo, con el objeto de lograr división de funciones y controles cruzados, necesarios para evitar negligencias, errores e infidelidades futuras. Contratación de una auditoria forense que permita detectar si otros funcionarios han estado envueltos en las irregularidades antes señaladas.

"Coincidimos con las autoridades en que hay que sancionar con todo el rigor de la ley a todos quienes fuesen responsables de cualquier perjuicio que se haya causado al Isspol. Estamos prestos a colaborar con las autoridades en esa misión. Pero no podemos coincidir en que para alcanzar ese objetivo el camino sea el cierre de Decevale. El perjuicio al mercado de valores sería inconmensurable. Y aspiramos a que, en este punto, impere la calma".

Reitera que la Bolsa de Valores de Guayaquil no tiene relación con estos actos.