Este 16 de abril se cumplen cuatro años del gran terremoto en Ecuador que dejó 663 fallecidos y destruyó ciudades especialmente en Manabí y el sur de Esmeraldas. La situación de estas zonas, lejos de presentar mejoras en cuanto a infraestructura y servicios básicos, hoy se complica más con la emergencia sanitaria a raíz de la propagación del coronavirus en el país.

De 7.8 grados, el sismo convocó, como ahora, la unidad de todos los ecuatorianos para afrontar la emergencia. El Gobierno de entonces, presidido por Rafael Correa, tomó fuertes medidas económicas para ayudar a la reconstrucción de las zonas más afectadas.

Sin embargo, hoy siguen resonando las quejas y demandas de atención, especialmente en poblaciones de Manabí, en medio de la nueva emergencia sanitaria que ya ha cobrado 32 vidas, y 219 casos confirmados en esa provincia, lo que la convierten en la cuarta más afectada según datos oficiales.

Allí, donde hace cuatro años la naturaleza destruyó 9.663 edificaciones, hoy cunde el temor por la enfermedad del momento, aunque aún esta no llega a poblaciones como Pedernales y Jama, que están entre las más afectadas por el sismo.

Sin embargo, en poblaciones rurales de los cantones Manta y Montecristi, han ocurrido otras 32 muertes repentinas en los últimos días, provocadas por síntomas relacionados con el COVID 19, según los deudos, que claman la llegada urgente de brigadas médicas a estos poblados.

Sin olvidar las promesas de reconstrucción, hoy la mayoría de municipios están atareados en la desinfección de espacios públicos y otras medidas que eviten más contagios, tarea difícil, ya que pocos son manabitas que usan mascarillas, entre otras medidas de prevención.

En Portoviejo y Manta se concentra la mayoría de infectados (60 %), según el COE. Le siguen Chone, Jipijapa y El Carmen.

La crisis sanitaria en Manabí va más allá del coronavirus. El dengue es otra enfermedad que está atacando a sus habitantes. Según un informe oficial con cierre al 14 de abril, hay un total de 1.362 casos, 66 más que en todo 2019.

En Manta, el alcalde Agustín Intriago informó que 226 barrios fueron fumigados “para hacerle frente a las enfermedades del momento”.

Julio Villacreses, coordinador provincial de la Comisión Nacional Anticorrupción indicó que sienten frustración porque los responsables del mal manejo de los dineros para la reconstrucción, siguen libres.

Lamentó que lo ocurrido ha repercutido en la crisis sanitaria y salud que vive el país,argumentando que en Manabí no se priorizó la construcción de hospitales pero sí la Autopista Manta - Colisa cuyo monto asignado fue de $83. 000. 000 y el Parque Las Vegas en Portoviejo con $10.000.000

“No se han podido realizar los hospitales de Manta, Pedernales, Chone, Bahía de Caráquez, y la reactivación del Verdi Cevallos de Portoviejo, se despilfarró en una obra que no tenía que ver nada con la reconstrucción”, dijo Villacreces.