El anuncio del gobierno central, de que los gobiernos provinciales y cantonales coparticipen en la toma de decisiones en sus jurisdicciones sobre el color del semáforo que empezará a regir desde el 4 al 31 de mayo, que permita flexibilizar el aislamiento social por el coronavirus y dar paso al restablecimiento medido de actividades productivas, tuvo su primera respuesta en la alcaldesa de Guayaquil, la socialcristiana Cynthia Viteri.

La ciudad más poblada del país, con 2,6 millones de habitantes, también es la más castigada por el COVID-19, con más de 15.000 contagiados y miles de fallecidos, unos confirmados y otros bajo sospecha que fallecieron en sus casas.

A través de un mensaje de Twitter, la alcaldesa Viteri dice que ante la decisión de la presidencia, de derivar la responsabilidad a los municipios, ella exige lo siguiente:

1. Cumplimiento inmediato de asignaciones presupuestarias hasta el mes de abril y el depósito de las siguientes dentro de los 10 primeros días de cada mes.

2. Devolución inmediata de los valores retenidos por IVA en efectivo y pago inmediato contra resolución emitida por el SRI.

3. Poner a disposición del COE cantonal a la Policía Nacional y a la Fuerzas Armadas para la ejecución del orden en la ciudad.

Entre las responsabilidades cantonales también está la implementación de campañas de educación y comunicación de las normas de cuidado y protección para la población.

En una cadena nacional, emitida hace dos horas, hoy 26 de abril de 2020, la ministra de Gobierno, María Paula Romo, estableció las responsabilidades de los municipios, entre ellas, realizar el control de las actividades comerciales y del cumplimiento del uso de mascarillas y distancia interpersonal en el espacio público, los buses y paradas de transporte público y la desconcentración del pago de servicios básicos para reducir el desplazamiento y aglomeración de ciudadanos.