CELI
Diligencia. El contralor Pablo Celi, uno de los sospechosos de delincuencia organizada, durante la audiencia de formulación de cargos en abril.Cortesía

El contralor Pablo Celi fue hospitalizado por presentar síntomas de COVID-19

Se encuentra en el hospital Eugenio Espejo de Quito. Su abogado Marcelo Ron pedirá el traslado hacia otra casa de salud

La noche del martes 8 de junio de 2021, el contralor subrogante Pablo Celi fue trasladado desde la cárcel 4 hacia el hospital Eugenio Espejo de Quito, tras presentar síntomas de COVID-19. En esa casa de salud se confirmó que Celi estaba contagiado con el virus, según informó su abogado Marcel Ron.

Celi es uno de 13 procesados por posible delincuencia organizada en el denominado caso Las Torres en el que la Fiscalía investiga una supuesta red delincuencial dedicada al cobro de coimas a cambio del desvanecimiento de glosas a empresas contratistas de Petroecuador como NoLimit.

El jurista se trasladó hasta el hospital para seguir de cerca la evolución de la salud del funcionario que está detenido desde el pasado 13 abril junto con su hermano Esteban y Luis Agusto Briones.

El abogado señaló en un comunicado que su cliente ingresó al área COVID del hospital a cuidados intermedios en donde estuvo con oxígeno. Además exhibió los resultados de la prueba de COVID-19 en la que se habría confirmado que fue contagiado

Ron indicó además que ha pedido el traslado de su defendido a otra casa de Salud para que reciba la atención debida. Ese será uno de los insumos que presentará el próximo 14 de junio en la Corte Nacional de Justicia en que se realizará la audiencia revocatoria de la prisión preventiva dictada en contra del funcionario. Según el defensor, la mencionada petición se fundamenta en el derecho de ser procesado bajo el principio de igualdad con relación al trato que se ha dado a otros involucrados.

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También señalará que se han desvanecido los indicios y elementos de convicción que motivaron la prisión preventiva y que, con la privación de libertad se bloquea el acceso a servicios médicos especializados y de calidad que requiere el contralor para tratar las enfermedades crónicas degenerativas, con alto riesgo de ceguera, que presenta en el ojo derecho.

La defensa añadió que el contralor fue trasladado al área de COVID del hospital Eugenio Espejo y "esta condición eleva sustancialmente la vulnerabilidad de su salud al presentar picos de hipertensión arterial tensional".