La maniobra política se impone. En las sesiones fallidas del Concejo Metropolitano, de las últimas semanas, hay características similares que se alejan de las normas administrativas y de bioseguridad que exigen los tiempos de una emergencia sanitaria. Según los concejales que cuestionan al alcalde Jorge Yunda, la estrategia busca amedrentar a quienes cuestionan al funcionario por los actos de corrupción en los que está involucrado él y sus familiares.

La última muestra se vio el martes. En el Mercado de Chiriyacu, al sur de la ciudad, se realizó la sesión del Concejo que no prosperó porque Yunda suspendió abruptamente el encuentro luego de cuestionamientos por las denuncias de corrupción. Silenció el micrófono de sus detractores y salió protegido por la Policía Nacional para evitar a la prensa.

La convocatoria incluía a los concejales, autoridades municipales y al alcalde de la capital, sin embargo, también asistieron comerciantes del mercado que rodearon a los concejales. Ellos cantaban consignas a favor del funcionario observado por la Fiscalía General.

La concejala Luz Elena Coloma tiene una lectura preocupante. Para ella, no es coincidencia que se haya convocado a la sesión en el mercado que -tradicionalmente- es una de las sedes con mayor número de simpatizantes del correísmo después de las elecciones presidenciales del 11 de abril. El plan de Yunda, dijo la concejala en el programa radial A Primera Hora, era que haya aún más respaldo para el alcalde que abiertamente ha sido ‘blindado’ por los concejales de la revolución ciudadana.

El plan tuvo una falla: Andrés Arauz perdió la Presidencia y la convocatoria, aunque numerosa, no fue la esperada.

Pero aún con menos gente, la idea de convocar a sesiones con público es un riesgo sanitario por la posibilidad de contagios de coronavirus. Resulta irónico, aseguran los concejales, que Yunda pida un estado de excepción y un confinamiento voluntario cuando, al mismo tiempo, invita a sus simpatizantes a que aplaudan sus intervenciones en vivo.

Además del riesgo a la salud, hay un riesgo por actos violentos. Fernando Morales, el concejal que fue silenciado por Yunda, recibió insultos por parte de los asistentes al mercado. Admitió que pudo sufrir agresiones físicas.

Hoy, 15 de abril de 2021, el Concejo intentará reunirse por cuarta ocasión y otra vez se realizará en un lugar con posibilidad de público.