"Yo sabía que no se iba a escapar y lo iba a encontrar" , dijo Alexandra Maliza, la dueña de Botas, un gato gris que apareció luego de casi dos días de la tragedia en Alausí.

Cuando ocurrió el deslizamiento de tierra Maliza y sus hijas salieron con vida de una casa de tres pisos. Fueron rescatadas en las primeras horas con raspones y una lesión en el brazo izquierdo. Nada grave.

Sin embargo, una de las niñas no podía estar en paz porque su mascota no salió con ellas. "Lloraba y preguntaba por el gato", relató la sobreviviente.

La tarde de este martes 28 de marzo, continuaron las tareas de recuperación de enseres en las viviendas afectadas. Bomberos y militares entraron a la parte menos hundida de la casa para sacar un poco de ropa.

Un sonoro "miau" hizo saltar el corazón de Alexandra y pidió que saquen al minino. "Cuando se asustaba se metía abajo de la cama. Ahí estaba", agregó.

En cuánto se encontraron, Botas se aferró al pecho de Alexandra sin dejar de temblar. La hija de la mujer se llevará una gran sorpresa cuando ella llegue hasta donde se alojan con el animalito.

"Tiene menos de un año. Fue un regalo de una amiga. Es parte de la familia", finalizó su dueña.